Monterrey,.- A siete años del ataque al Casino Royale, donde murieron 52 personas, la Fiscalía General de Nuevo León mantiene abiertas las investigaciones para determinar responsabilidades de otras personas, entre ellas ex funcionarios municipales y estatales.
El vicefiscal de Ministerios Públicos, Enrique Orozco Suárez, informó en conferencia de prensa que existen 17 personas en prisión por su participación probable o plena en el incendio al Casino, en hechos ocurridos el 25 de agosto de 2011, más una más que falleció durante un motín en el Penal del Topo Chico.
Refirió que cuatro de los responsables están condenados a prisión con penas que oscilan entre los 75 a 100 años de prisión.
“Se mantienen en prisión a 17 personas por su participación probable o plena, una más que ya falleció en hechos sucedidos en el penal, en un motín, el resto se encuentran internados en el penal del Topo Chico o distintos centros penitenciarios del estado o del país”, remarcó.
Detalló que del total de estos responsables en el ataque al Casino Royale, tres promovieron juicios de amparo contra distintos actos procesales, los cuales concluyeron con una orden o de reponer los procedimientos.
“Cuatro de las causas se encuentran detenidas por reclamos de los procesados, se ordenó investigar la supuesta existencia de tortura, dos procesos están en curso en distintas etapas de procedimiento.
“Es interés de la Fiscalía mantener causas penales contra estas personas y obtener nuevas sentencias condenatorias contra personas que hayan recibido sentencias de juicios de amparo favorables”, explicó.
El vicefiscal manifestó que la Fiscalía ha tenido reuniones con los familiares de algunas de las víctimas, con quienes han compartido información sobre los procesos penales.
Dichas reuniones, agregó, se han desarrollado con personal de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CEDH).
“Se les informa sobre la conclusión de estos procesos, y asimismo se les indica que en su oportunidad se iniciaron distintas investigaciones que dejaron una reserva abierta en la investigación para la dictaminación de otro tipo de responsabilidades penales que hayan sido cometidas por particulares”, indicó.
Subrayó que hasta el momento no se tiene una orden de aprehensión en contra de Raúl Rocha, propietario del Casino Royale.
Sin embargo, subrayó, “la averiguación previa continúa abierta, no ha concluido permanentemente y no se ha descartado su participación ni la de él, ni de ninguna otra persona”.
Asimismo, dijo que los familiares de 21 de los 52 fallecidos, recibieron una compensación económica a manera de reparación del daño.
Enfatizó que hasta el momento han sido investigados y sujetos a declaración ministerial más de 150 personas que desempeñaban cargos en el gobierno del estado y municipio de Monterrey en 2011 cuando se registraron los hechos.
El 25 de agosto de 2011, un grupo de entre 13 y 16 personas causaron un incendio en el Casino Royale, ubicado en el sector de San Jerónimo, en esta ciudad, al rociar bidones de gasolina en su interior, en una hora en que el lugar registraba alta asistencia.
El fuego se extendió rápidamente por sus instalaciones, generando la movilización de los cuerpos de auxilio que tras varias horas de intensas labores por sofocar el fuego, dieron cuenta de un total de 52 víctimas, muchas de las cuales fallecieron por intoxicación de monóxido de carbono.
Tras la tragedia, se detectó que el lugar carecía de salidas de emergencia o estaban cerradas, lo que derivó en investigaciones de autoridades municipales y estatales.
