20/Apr/2024
Editoriales

Causa Biden explosión migratoria en la frontera y la oculta y reprime

 

El miedo no anda en burro, dice el refrán popular. La visita en estos días, de Roberta Jacobson a México, Coordinadora de la Frontera Sur del gobierno de Washington, es resultado de la “explosión fronteriza” desatada por Joe Biden al prometer reformas migratorias y facilidades a los migrantes.  Esa promesa provocó que en la frontera del Valle de Texas -- de MaCallen a Brownsville- , el número de migrantes aumentara de 1660 a 2000 diarios, y durante el mes de febrero, llegó a 130 mil personas. 

La Patrulla Fronteriza (Border Patrol) reporta 9500 “encuentros” con “niños sin acompañamiento” durante el mes de febrero.  Por este “aumento” (surge) de migrantes –similar a otros ocurrido en 2014 y 2019 --, los centros de detención se “saturaron” y Joe Biden ordenó mantener “secrecía”, como lo pone The Dallas Morning News, impidiendo que la prensa y medios tuvieran acceso a esas instalaciones. 

Sin embargo, el congresista demócrata texano Henry Cuellar, publicó video y unas fotografías de varios de esos centros de detención en Donna, Texas, cerca de MaCallen, donde se ven cuartos llenos de niños y algunos adultos, durmiendo sobre alfombras en el suelo y cubiertos con “sabanas de aluminio” y separados por plásticos. Joe Biden decidió, según el reportaje de Adrian Gomez Licon de la agencia AP publicado por The Hosuton Chronicle y otros diarios, seguir con la misma política de Trump, la de expulsar a todos los adultos, sobre todo si son solteros, utilizando el “titulo 42” de la ley de salud, que Trump uso debido a la pandemia Covid 19, para hacer expulsiones masivas incluso de niños el año pasado.

Sin embargo, lo reporta también The Los Angeles Times, ahora se usa un criterio de “triage”, es decir; a los “niños sin acompañamiento” no se les expulsa pero a las familias con niños menores de 6 años se les clasifica bajo el criterio de “vulnerabilidad aguda” , y a unas se les expulsa y a otras se les inicia trámite de asilo, con un “papelaje corto”, es decir poca papelería, que les permite enviar a sus hijos a la escuela pero no trabajar ni tampoco inicia proceso de asilo o este puede ser suspendido y de todas formas expulsarlos. Ha sido tantas las familias expulsadas diariamente, que las autoridades mexicanas en Tamaulipas se han negado a recibir más deportados. Esto ha contribuido al saturamiento de los centros de detención y existen al menos 9,457 niños sin acompañamiento, que van a tener que ser enviados a Dallas, para ser “hospedados” en un Centro de Convenciones. 

Según estos diarios, el cruce de niños sin acompañamiento aumento en un 690%, en relación al 2019, antes de la pandemia. Roberta Jacobson, la coordinadora de la Frontera Sur de EU, visitó México para buscar una solución “más humana” a esta crisis, pero les pidió a los migrantes ni ir a la frontera porque “está cerrada”. Joe Biden enfrenta la presión de sus adversarios en el Partido Republicano como el senador Ted Cruz, que le reclaman que sigue la misma política de Trump, pero más dura aún, sobre todo porque el ex presidente nunca ocultó lo que hacía y permitía a la prensa acceso a los centros de detención. De cualquier forma, la propuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador, aparase como la única solución: Financiar proyectos de desarrollo empleo en Guatemala, Honduras y El Salvador, para evitar que miles de personas quieran abandonar sus países huyendo de la pobreza, la violencia y el hambre.