19/Apr/2024
Editoriales

Marzo 10 de 1919: nace en Frontera, Tabasco, José Emilio Amores, quien sería catedrático universitario y destacado impulsor de la cultura en Monterrey

Marzo 10 de 1919: nace en Frontera, Tabasco, José Emilio Amores, quien serí­a catedrático universitario y destacado impulsor de la cultura en Monterrey. José Emilio Amores Cañals, pasa su niñez en la ciudad de México, donde estudia hasta terminar su carrera de ingeniero quí­mico en la UNAM.

En la década de los años cuarenta llega a nuestra ciudad y decide pasar en Monterrey el resto de su vida, pues se enamora de la forma de ser del nuevoleonés, con una cultura de trabajo especial y muy avanzada respecto al resto del paí­s. En 1944 inicia como catedrático de quí­mica en el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores de Monterrey, contratado desde la ciudad de México por el primer director de esa institución, León ívalos y Vez, quien se impresionó con el joven cientí­fico que estaba recomendado por dos grandes fí­sicos mexicanos: Manuel Sandoval Vallarta (discí­pulo de Einstein) y Carlos Graef Fernández. Ya radicando en Monterrey fue nombrado director de la Preparatoria del ITESM, en el año de 1947, y su materia con la que inicia como catedrático, es la de álgebra.

Continuó formando preparatorianos hasta 1959 que fue nombrado director de ingenierí­a y arquitectura hasta 1966, y posteriormente, vicerrector hasta 1969. Cuando intentó traer a Monterrey a los músicos del Palacio de Bellas Artes y su director Carlos Chávez no lo permitió, Amores decidió crear –y lo consiguió- la Sociedad Artí­stica Tecnológico, que dirigió por 32 años ininterrumpidamente.

Hay muchas y ricas historias de cómo se esmeró en traer cultura a Monterrey, comenzando por el primer recital de piano que promovió con Walter Hautzig, pues tení­a todo solucionado, como el patrocinio de viáticos del personaje alemán, así­ como los gastos propios de un gran evento, pero le faltaba hasta tres dí­as antes ¡el piano! Desde luego que a última hora lo consiguió pero fue famosa la anécdota que estaba a 72 horas del recital y Amores tocaba puertas entre la sociedad amante de la música para que alguien aceptara prestar tan noble instrumento musical.

Al terminar su periodo laboral en el ITESM, José Emilio Amores fue muy solicitado por las diversas instituciones culturales, así­ que no pudo negarse a dirigir el Museo de Monterrey, el Centro Cultural Alfa, el Museo de Historia Mexicana y Radio Nuevo León, posiciones desde las cuales difundió la cultura y el arte a las grandes masas de nuevoleoneses, ávidas de esas actividades. Fue parte del primer Jurado Calificador del Trofeo Regio que se entregó por primera vez en el año de 2000.

En su productiva vida no podí­a faltar la escritura de libros relacionados con su pasión, el arte, así­ como ensayos y obras de teatro, como también bellas poesí­as. Los siete dí­as de la Creación; Fonda de las Ilusiones, Lectura de hoy, La industrialización, en el capí­tulo Monterrey de Una Cultura propia en Nuevo León en el siglo XX, entre otras finas obras. José Emilio Amores, rindió tributo a la madre tierra el 27 de junio de 2014.