02/May/2024
Editoriales

El periódico de ayer y los floreros

Ayer fue el domingo de resurrección, día festivo para los cristianos católicos, que somos el 77.7 % de los regiomontanos, y también para los protestantes evangélicos que son el 11.9 %, y el resto de cristianos bautistas, metodistas y otros cultos religiosos.  

Inicia la semana de Pascua mientras estudiantes y maestros continúan de vacaciones aunque el mundo siga girando, así sea a una velocidad menor.  

Pasar en casa el domingo obliga a leer el periódico como alternativa para darnos idea de lo que sucede, al menos de lo más criticable.

En la primera plana electrónica de El Norte se publicaba una fotografía de la presa El Cuchillo, la única de las tres que aún tiene agua para la Ciudad, aunque ya comienzan a verse algunas islas, es decir, el nivel va preocupantemente a la baja.

También se informaba que en las carreteras de entrada a la Ciudad había filas kilométricas de automóviles que traían de regreso a miles de ansiosos vacacionistas que querían llegar a sus casas para descansar de su descanso.

Y las fotografías más llamativas eran del tercero y último día del evento Pa’l Norte, que congregó a miles de jóvenes que cantaron y brincaron al ritmo marcado por sus artistas favoritos, mientras algunos ‘perdían’ sus celulares y otros los ‘hallaban’ desde antes que los extraviaran sus propietarios. 

Los asistentes a estos espectáculos odian la tristeza y necesitan que los grandes aparatos amplificadores de sonido les obliguen a no pensar para conservar la sonrisa. Sufren la paradoja de que en nuestra Ciudad vivimos millones de personas, pero cada uno carga su propia soledad. 

Esa actitud de desenfado y búsqueda de alegrías momentáneas, es señal de que los jóvenes no aprecian el legado de Gutenberg y están sustituyendo los libros por el ruido y la imagen.

En el periódico de ayer aparecía varias veces el gobernador Samuel García exigiendo resultados contra la contaminación ambiental, aunque no quedaba claro a quien le exigía. Y le espetaban que se negara a declarar algo acerca de la violencia que sacude al estado, lo que devela tristemente que el temor nos está uniendo más que el amor.

Y para cerrar la descripción de la edición de ayer, claramente el porcentaje mayor del periódico se dedicaba a información relacionada con las campañas políticas de los candidatos a las alcaldías metropolitanas, iniciadas en la medianoche del sábado.

Pero las campañas políticas se están tratando como el evento de Pa’l Norte, siendo que no son show para divertir, sino para plantear soluciones a los problemas.

Hacer campañas políticas que no planteen propuestas de soluciones, es como postular que una mesa existe pero sin tener ni una sola silla. Para efectos prácticos esa mesa es un florero.