Redacción, L.A. Times  

Como ocurre con muchas relaciones internacionales, el presidente Biden busca un reinicio con México. El lunes, él y el presidente Andrés Manuel López Obrador tuvieron su primera reunión como jefes de estado, buscando construir una asociación para trabajar contra una persistente crisis migratoria en la frontera de sus naciones.

La “cumbre virtual”, en la que Biden y López Obrador hablaron por videoconferencia, fue la segunda reunión de Biden con un líder mundial desde que asumió el cargo, seis días después de su cumbre bilateral con el primer ministro Justin Trudeau de Canadá.

Biden comenzó la reunión del lunes diciéndole a López Obrador: “En la administración Obama-Biden, nos comprometimos a ver a México como un igual, no como alguien que está al sur de nuestra frontera. Eres igual. Y lo que haces en México y cómo lo logras impacta dramáticamente en cómo será el resto del hemisferio”.

López Obrador dijo anteriormente que promovería un plan similar al programa “bracero” de las décadas de 1940 y 1950, una especie de sistema de trabajadores huéspedes que permitía a millones de mexicanos ingresar legalmente a Estados Unidos para trabajar en la agricultura.