Internacional

Los rebeldes sirios forman a nuevos reclutas en Alepo

Alepo (Siria) .- Mohamed no salí­a casi nunca de su taller de costura, pero hace dos semanas este sirio decidió abandonar aguja e hilo para ir a un campo de entrenamiento rebelde, con la intención de aprender a defender su barrio de la ciudad de Alepo frente a las fuerzas gubernamentales.

Los insurgentes comenzaron a perder terreno en la provincia de Alepo, en el norte de Siria, en febrero, tras un amplia ofensiva lanzada por las tropas del régimen del presidente Bashar al Asad, con apoyo de sus aliados rusos.

Los barrios rebeldes del este de esta localidad están prácticamente rodeados y el régimen intenta cortar la única ruta de salida que queda libre.

Los responsables del campo de entrenamiento ubicado en un barrio rebelde dicen que continuarán formando reclutas mientras el ejército sirio siga avanzando, esto pese al acuerdo de alto el fuego anunciado por Rusia y Estados Unidos que debe entrar en vigor el sábado.

Cuando comenzaron las revueltas antigubernamentales en 2011, "participé en las manifestaciones, pero nunca he tocado un arma", asegura Mohamed, de 20 años. "Pero, tras el avance del régimen en el norte de la provincia, decidí­ venir a este campo de entrenamiento para aprender a usar un arma. Tengo miedo de que el Ejército nos asedie por completo", cuenta este joven alto y delgado.

- "Nos matarán a todos" -

En este campo, rodeado de edificios en ruinas, los jóvenes se entrenan con armas automáticas tipo kalashnikov, acompañados por un oficial que les proporciona asesoramiento sobre cómo posicionar los brazos y piernas.

"Si las tropas del régimen logran entrar en (el este de) Alepo no harán ninguna diferencia entre un civil y un rebelde. Nos matarán a todos", asegura Mohamed, que vive en el barrio rebelde de Saladino. "Debemos defendernos e impedir que el régimen entre a nuestros barrios", añade.

Este campamento de entrenamiento fue creado por una coalición de facciones rebeldes no islamistas. Aunque esta sigue controlando más de la mitad de los barrios del este de Alepo, ha quedado marginada frente al ascenso de los yihadistas de Al Nosra y del grupo Estado Islámico (EI) en el resto de la provincia homónima.

Desde hace dos semanas, las facciones de Alepo convocan una movilización general a través de sus estaciones de radio y televisión. Decenas de civiles, de entre 17 a 30 años, respondieron presente.

"La última ofensiva del régimen nos ha debilitado", admite el general desertor Ahmad Kurdi, un oficial que supervisa la formación.

- 'Defender a mi familia' -

"Los rebeldes han perdido cientos de combatientes que defienden los pueblos y ciudades del norte de la provincia de Alepo. Es por esto que hemos convocado una movilización y creado este campo, para defender la ciudad y lo que nos queda de la provincia", explica. "Aquí­ hay gente que nunca ha portado un arma, les enseñamos a usarlas pero también táctica militar", añade el general Kurdi.

En una sala, en donde otro general imparte una clase teórica de combate armado, Omar, de unos veinte años, está seguro de que tomó la decisión correcta. "El peligro es latente. Tengo miedo de que el régimen entre, es por eso que vine", cuenta.

Anuar, un ex estudiante de historia en Alepo de 24 años, cuenta que es también la primera vez que toma un arma. "En el contexto actual, es nuestro deber comprar un arma", dice. "Me compré un kalashnikov por 130.000 libras sirias (unos 300 dólares) y vine para entrenarme". Pero para él, la prioridad no es ir al frente. "Quiero aprender a usar un arma para defender a mi familia en caso de emergencia", dice