02/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Enero 02 de 1983: se presentan compras masivas de pánico agotando a media mañana las existencias en las gasolineras, con el consecuente desorden en el transporte público y privado de pasajeros. Este fue el resultado de un rumor esparcido en las grandes ciudades de México acerca de un supuesto incremento en el precio de los combustibles. Apenas llevaba un mes gobernando el presidente Miguel de la Madrid, y el día primero del año había entrado en vigor la Ley de Ingresos federales, en la que se contemplaba un impuesto adicional a los precios de consumo de la energía eléctrica, pues la idea era liberar el subsidio a las tarifas eléctricas. Esta medida se tomó -una de las últimas decisiones de José López Portillo- obligadamente porque el FMI exigió realizar una serie de gestiones concretas en el rubro económico para acceder a prorrogar por tres meses el pago de la deuda nacional. Dos días después -el cuatro de enero-, De la Madrid daba un mensaje a la Nación con motivo del año nuevo, y aprovechó el discurso para explicar las razones por las que envió el proyecto de presupuesto aprobado dentro del paquete de reformas legislativas, respondiendo a las críticas de estar ejerciendo un gobierno autoritario.

Y al día siguiente iniciaron las drásticas acciones económicas autorizando incrementos en el huevo, el aceite comestible, el arroz y la sal. Dos días después se les condonaría a los agricultores, de enero a abril, el pago de impuestos. El problema económico del país era grande, pues la administración de José López Portillo había sufrido graves extracciones de divisas, al grado de tener que nacionalizar la Banca, y ello puso muy nerviosos a los acreedores, amén del desastre económico derivado de la guerra del petróleo en los mercados internacionales, y los escándalos de corrupción. El gobierno de De la Madrid tomó acciones económicas relevantes, consolidándose como una buena administración, pero en 1985 le tocó lidiar con los efectos de un grave terremoto que zarandeó a todo México, y su gobierno fue acusado por la oposición de ausente durante el desastre en la capital mexicana. Miguel de la Madrid sudó la gota gorda para nivelar la economía nacional, pero a costa de un impopularidad que cobró su factura en las elecciones de 1985.