03/May/2024
Editoriales

El precio del éxito

No son pocos los personajes exitosos que han pagado caro su éxito. Uno de ellos se llamó Francis Bacon (1561 – 1626) un excepcional investigador inglés. 

 Además era reconocido como estadista, filósofo, escritor y científico; sostenía que todo conocimiento debía partir de las sensaciones que aporte la experimentación en primera persona. 

 Como todos los investigadores científicos, exploraba las propiedades del frío en la prevención de la putrefacción de alimentos. 

 Cierto día, que andaba hurgando en los alrededores de Londres, al llegar a Highgate, en Hamped Heath, le sorprendió una fuerte nevada. 

 Su condición de investigador científico y de acuerdo a su teoría del conocimiento y las sensaciones, tuvo la idea de inventar cómo conservar alimentos, así que entró a una granja, compró un par de pollos, los mató y rellenó de nieve. 

 Su experimento funcionó pues la carne de los pollos se conservó sin podrirse pero desafortunadamente él atrapó una neumonía tremenda, misma que le llevó a la tumba el 9 de abril de 1626. 

 

 Este gran científico inglés, Francis Bacon, murió haciendo lo que le encantaba: investigar.