23/Apr/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Septiembre 17 de 1973: muere asesinado en Monterrey, don Eugenio Garza Sada, uno de los empresarios con mayor visión e influencia de México. Nació el 11 de enero de 1892 en Monterrey, del matrimonio formado por Isaac Garza Garza, fundador de la Cervecería Cuauhtémoc, y Consuelo Sada Muguerza. Estudió sus primeras letras en el colegio jesuita de Saltillo, Coahuila, y en el colegio Hidalgo de Monterrey, de filosofía marista. Debido a un exilio temporal de su familia por motivos de seguridad derivados de la Revolución mexicana, vivió en Estados Unidos en donde estudiaba y trabajaba. Cursó y se tituló en 1916 de Ingeniero Civil en MIT (Instituto Tecnológico de Massachusetts). Regresó a Monterrey a trabajar en Cervecería Cuauhtémoc y en 1921 casó con Consuelo Lagüera Zambrano, procreando a sus hijos Eugenio, Alejandro, Alicia, Gabriel, David, Marcelo, Consuelo y Manuel Garza Lagüera, que luego se integrarían a la vida productiva y social del Estado.

En 1933 murió don Isaac, así que Eugenio y su hermano Roberto quedaron al frente de las empresas familiares, fundando en 1936 Valores Industriales, S. A. (VISA) que en 1938, contaba con doce empresas importantes. Cervecería Cuauhtémoc, Cervecera Veracruz, Cervecería Central, Cervecería del Oeste, Fábricas Monterrey, Malta, S. A.; Empaques de Cartón Titán; Compañía General de Aceptaciones; Inversiones Mercantiles y otras más. Don Eugenio Garza Sada presidía este paradigmático grupo industrial conocido como Grupo Monterrey que luego fundó Hojalata y Lámina (HYLSA); invirtió capital en diversos medios de comunicación, como la Editora El Sol, durante el nacimiento del periódico El Norte; adquirió la estación de radio XET; y cofundó Televisión Independiente de México, que luego se fundió con Telesistema Mexicano para formar Televisa. A principios de los años setenta, VISA, dirigida por don Eugenio tenía 90 empresas con 33 mil empleados. Su obra social y filantrópica es enorme, y su mayor orgullo fue crear el Instituto Tecnológico de Monterrey, en el año de 1943. Don Eugenio Garza Sada fue asesinado durante un intento de secuestro, por un grupo de jóvenes con ideología socialista de la Liga Comunista 23 de septiembre.

Su funeral fue multitudinario; 50 mil personas fueron a despedir al benefactor de Nuevo León y a acompañar su familia, en un evento memorable con la presencia del presidente Luis Echeverría, quien recibió un desaire del orador Margáin Zozaya, de la familia Garza Lagüera, y todo el cortejo fúnebre, en rechazo a su política de tolerancia a ese tipo de organizaciones criminales que acabaron con la vida de varios mexicanos distinguidos. Sin embargo, tras el sepelio se inició una cacería de los integrantes de estas células comunistas hasta prácticamente acabarlas, lo que atenuó el sentimiento inicial.