---Su acercamiento a Rusia o su oposición al libre comercio las posibles causas
El ex presidente norteamericano Barack Obama anunció hoy en un comunicado que está "en desacuerdo fundamental con la noción de la discriminación de individuos basada en su fe o religión" refiriéndose a los decretos anti refugiados emitidos por el presidente Donald Trump.
Obama, el presidente que más guerras inició y mantuvo en contra de países islámicos o árabes, anunció además que se mantendrá "activo" en las cuestiones políticas y que veían en las movilizaciones de ciudadanos contra las decretos de Trump algo que lo "alentaba" ya que la ciudadanía, dijo, "tiene la responsabilidad de ser guardianes de la democracia" y deben actuar cuando "los valores fundamentales están en juego". Obama fue también como presidente, el principal apoyo a las "revoluciones de colores" en países de ífrica del Norte, especialmente en Libia y Egipto. Horas más tarde, un grupo de legisladores demócratas encabezadas por los congresistas Nancy Pelosi y Chuck Schumer realizaron una protesta frente a la Suprema Corte de Justicia exigiendo la revocación de las órdenes ejecutivas de Trump en contra del ingreso de musulmanes de 7 países a los Estados Unidos. Los legisladores demócratas anunciaron que seguirán con sus movilizaciones hasta que "la orden ejecutiva sea rechazada". Obama y los demócratas se unen así a George Soros el magnate financiero que desde el Foro de Davos de principios de enero declaró que "Trump en un fracaso y tengo interés personal en que fracase".
Soros señaló que Trump "tiene afinidades con los dictadores" como Vladimir Putin y que podría "convertirse en un dictador" también. Soros financia a 51 de las organizaciones de mujeres que protestaron contra Trump en días pasados y pagó hasta 1,500 dólares semanales a los que protestaran frente a la Torre Trump en Nueva York días antes de las elecciones presidenciales de noviembre. La organización Open Society que encabeza Soros ha estado detrás de las llamadas "revoluciones de colores" en Ucrania en el 2005 o en ífrica del norte en el 2013, todas ellas contra gobiernos opositores a los dictados económicos de Washington o, como en el caso de Siria, opositores a su política exterior. En el caso de Trump su oposición al libre comercio y a las guerras en el Medio Oriente así como su acercamiento a Rusia podrían ser la causa.