Abril 6 de 1911: muere en Monterrey el empresario, militar y político Evaristo Madero. Nacido en Bizarrón, Coahuila en 1828, en una familia acomodada venida a menos por la invasión norteamericana que le hace perder propiedades en Texas, inició su propio negocio de transporte en Monterrey, vinculándose a Santiago Vidaurri cuando éste estableció el Estado de Nuevo León y Coahuila (1856-1864), llegando a ser diputado constituyente y luego regidor de Monterrey. Casó con Rafaela Hernández procreando varios hijos entre los cuales destacó Francisco Madero Hernández, quien a su vez fue padre de Francisco I. Madero. Evaristo Madero se incorporó al Ejército del Norte luchando contra la intervención francesa, llegando a ser coronel.

Al mismo tiempo comenzó una cadena de éxitos empresariales en los ramos de agricultura y minería tanto en Coahuila como en Nuevo León, y en 1880 fue gobernador de Coahuila. En Monterrey fue acusado por el obispo Ignacio Montes de Oca de introducir a los bautistas en esta ciudad. Otra faceta de Evaristo es que fue un constructor de instituciones de crédito en nuestra ciudad, como el Banco de Nuevo León, en 1892, institución en la que Viviano L. Villarreal -yerno suyo- se desarrolló profesionalmente y alcanzó a ser gobernador de Nuevo León. Evaristo Madero presidió las juntas bautistas en Saltillo y no estaba de acuerdo en el movimiento contestatario y luego revolucionario que encabezaba su nieto Francisco I. Madero contra Porfirio Díaz. Tras la muerte de Don Evaristo en Monterrey, sus restos fueron trasladados a Parras, Coahuila.