La gigafactory que el exitoso empresario norteamericano Elon Musk instalará en terrenos del municipio de Santa Catarina ha sido calificada como la anticipación del futuro para Nuevo León, además de que las autoridades estatales y municipales llevan algunos días, que se podrían alargar a semanas, vendiéndonos la idea de que Nuevo León será el más próspero estado de México, comparable con el Silicon Valley de próspero estado de California.

 Seguramente la inversión ayudará en mucho las finanzas municipales, pues el Impuesto Predial se verá altamente enriquecido (a menos que se haya negociado la exención de ese impuesto por algunos lustros) y lo mismo sucederá con el Estado con otros impuestos, como el de nóminas (a menos que también se haya negociado una exención por algunos lustros), aunque estas factorías usualmente están altamente robotizadas y la mano de obra se requiere solamente en algunos procesos finales.

 No obstante, hay que ver las señales que se emiten en otros lugares del mundo. En Europa, por ejemplo, hay un acuerdo para no fabricar vehículos a gasolina a partir del 2030. Pero Alemania y al parecer Francia también, ya decidieron aplazar esa fecha, porque se percataron a tiempo de que Europa no tiene la capacidad para generar la electricidad que van a requerir todos esos autos eléctricos. 

 Las electrolineras, que sustituirían a las gasolineras, requieren de grandes capacidades para entregar suficiente energía eléctrica que se necesita en la recarga de las baterías de tantos vehículos. Por eso en Europa están replanteando la eliminación de otras fuentes de energía que requieren motores no eléctricos, como los motores a gasolina, pero que sea más efectiva y mucho menos contaminante, o el uso de combustibles como el hidrógeno, que en lugar expulsar el tradicional humo por los mofles, emitiría vapor de agua, o los biocombustibles, que arrojan escasas emisiones de CO2 al medio ambiente, los motores de gas natural y hasta automóviles que se muevan con la energía solar.

  La gigafactory de Tesla que todos se peleaban, tendrá un futuro de corto y mediano plazo con una gran producción, pero no se puede asegurar que el futuro está en la electromovilidad, al menos en México, porque si en Europa, los países más desarrollados no tienen capacidad para generar energía eléctrica para todos los vehículos eléctricos, sería muy complejo que la CFE pueda entregar todos los kilowatts que se requieren, si apenas y puede mantener el servicio doméstico, y con plantas que queman combustóleo para producir electricidad, lo que es mucho más contaminante que las gasolinas que utilizamos en la actualidad.

  La electromovilidad será parte del futuro cercano, sin duda alguna, pero no puede ser la única fuente de motorización, porque existen otras alternativas a los vehículos eléctricos para lograr una movilidad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente.