29/Mar/2024
Editoriales

Apenas inicia el caso Tomás Yarrington

El caso Tomás Yarrington apenas comienza pues hasta ahora el debate y la opinión pública los han querido centrar en su posible extradición a Estados Unidos donde le espera una condena de cadena perpetua, o a México donde le acusan por delitos que pueden ser de menor penitencia... hay otros aspectos que son relevantes pero que, como siempre, se les está dando importancia conforme son los intereses, cariños y fobias de quienes se dicen formadores de opinión pública... es digno de pensarse por qué no han insistido los que se sienten dueños de la verdad y la moralidad en la militancia prií­sta del ex prií­sta tamaulipeco...///

No lo hacen en primer lugar porque desde 2012 el PRI le suspendió como militante y quedó sin derechos al interior, y el año pasado lo expulsó definitivamente... así­ que eso es defendible, pero no sólo es eso, sino que Tomás Yarrington es un economista egresado del ITESM, y de las filas de los Ex A Tec no ha sido expulsado, ni siquiera señalado de alguna forma... esa es, en nuestra opinión, la explicación del por qué no han echado las campanas a volar –como acostumbran- en contra de un partido polí­tico, pues en la defensa de ese instituto polí­tico seguramente saldrí­a el argumento de cual es realmente su alma mater que coincide con la de los acusadores eternos... digo...///

En los asuntos económicos nacionales, es interesante la nota que hoy publica Regio.com respecto del bajo crecimiento de nuestra economí­a que contrasta con la creación de empleos... esto no puede tener otra explicación que la existencia de los llamados "empleos precarios" lo que no es ninguna novedad en México, pues ancestralmente la mano de obra nacional ha sido explotada... pero esa es una condición que inocentemente Audiencia Pública creí­a superada porque el nivel de vida en nuestro paí­s indiscutiblemente que ha subido... sin embargo, la triste realidad es que vamos corriendo a llegar a las condiciones de ingreso de las clases populares con rasgos a la pre revolución mexicana, cuando habí­a sólo grandes empresarios y hacendados, versus una inmensa mayorí­a de pobres – pobres... esperemos que no se llegue a esa lamentable condición... ///