27/Apr/2024
Editoriales

Santa Catarina ¿circo de tragicomedia?

En la vida pública suceden casi las mismas cosas raras, curiosas, buenas y malas, que en la vida privada. La diferencia es que en la primera -a excepción de las buenas-, todas se convierten siempre en escándalo, mientras en la segunda sólo llegan a nivel de chisme, es decir, su cobertura es menor.

Y así como sucede con las personas, que algunas son proclives a que les pasen tragedias, anécdotas o cosas de excepción mientras otras viven sin sobrasaltos, hay entidades públicas que son una especie de imán para los escándalos.

Es el caso del municipio de Santa Catarina cuya pobñación suele estrujarse con tragedias o con actos controversiales.

Como evento trágico, recientemente murió en plena campaña un candidato a presidente municipal, y en la otra cara de la moneda, han sucedido varios escándalos en los que se involucra a sus alcaldes. 

Recordamos que el alcalde santacatarinense Mario Salazar Salazar, fue envenenado supuestamente en una comida con sus compañeros del sindicato al que pertenecía, y aunque sobrevivió a esa ‘travesura’, ya el resto de su administración 1986 – 1988 nada era tomado en serio, porque decían, ‘son efectos colaterales’ de su envenenamiento. 

Otro alcalde santa catarinense polémico fue Atanasio González Puente, quien propuso instalar en su Municipio una zona de tolerancia como forma de incrementar los ingresos propios municipales y desde luego que se le vino el mundo encima. 

Además, al buen Tacho González la raza del puebo le achacaba que de noche lo veían abrazando árboles, supuestamente para tomar su energía, así que imagínese usted la chacota que duró por buen tiempo.

El alcalde actual Jesús Ángel Nava Riera fue postulado por el Partido Acción Nacional, instituto político que ha gobernado los últimos trienios, pero ya electo, Nava se incorporó a Movimiento Ciudadano, partido que gobierna Nuevo León.

Y ahora le toca en suerte que llegará una gran inversión a su territorio cuando el señor Elon Musk le confirmó al gobernador Samuel García que instalará una Mega Planta industrial de los autos Tesla.

Hasta allí todo iba más o menos bien, aunque desde luego traía encima las denuncias del partido que lo postuló, pero la verdad el señor no se salió un milímetro de lo establecido por las leyes respectivas.

Sin embargo, hace unos días explotó un escándalo denunciado por el periódico de mayor circulación: que Nava adquirió un terreno ejidal de cien hectáreas ubicado en el Parque Natural de La Huasteca, por la cantidad de 8 millones de pesos.

La nota ha sido el escándalo de los últimos días y, desde luego, el alcalde lo niega a pesar de que han salido a relucir documentos y declaraciones comprometedores.

Obviamente que su anterior partido está empujando con todo actos jurídicos en su contra, pues traficar con terrenos en una reserva ecológica va en contra del gran tema del desarrollo urbano de la Ciudad, que es el medio ambiente, y además exige que se investigue de dónde salieron esos recursos.

En realidad nunca supimos si Salazar fue envenenado, ni si Tacho abrazaba a los árboles y tal vez nunca sabremos si Nava compró ese predio, pero lo cierto es que estamos viviendo otro escándalo en el gran municipio del poniente del área metropolitana, que se ha convertido en un circo de tragicomedia.