DAMASCO — El gobierno sirio y sus aliados arrebataron un distrito en el sur del país al grupo Estado Islámico luego de semanas de combates que provocaron decenas de bajas a los dos bandos.

El ejército tomo la región de Tulul al-Safa el lunes y puso fin a la presencia de los extremistas en el sur, informó la agencia Medios Militares Centrales Sirios, vinculada con el gobierno.

A pesar de las derrotas sufridas en Siria e Irak durante los últimos dos años, el EI todavía conserva guaridas desde las cuales lanza sus ataques.

Con la toma de Tulul al-Safa, una zona montañosa al este de la provincia de Sweida, las fuerzas del gobierno controlan grandes territorios en el sur.

El Observatorio Sirio por los Derechos Humanos, con sede en Gran Bretaña, dijo que las fuerzas del gobierno tomaron la zona el sábado.