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"Fue difícil vestir a Redmayne de hombre", dice el diseñador 'La chica danesa'

Los Angeles.- El actor Eddie Redmayne vive una transformación increí­ble en 'La chica danesa', donde interpreta a una de las primeras personas que se cambió de sexo. Pero el diseñador español Paco Delgado, nominado al í“scar, asegura que "vestirlo de mujer fue fácil, lo difí­cil fue vestirlo de hombre".

El artista británico encarna al pintor danés Einar Wegener, quien a principios del siglo XX dio un paso al frente para vivir su verdadera identidad como Lili Elbe. En 1930, se sometió a la primera de una serie de cirugí­as para cambiar de sexo -un hito para la época-, al tiempo que logró legalizar su nuevo nombre. Pero las complicaciones post-operatorias le causaron la muerte un año más tarde. Para entonces, su caso era mundialmente conocido y hoy es considerada una de las principales figuras del movimiento LGBT.

'La chica danesa' puede contarse a través de las actuaciones de los actores dirigidos por Tom Hooper, pero el vestuario se convierte en un narrador excepcional de esta historia épica y de amor. "La moda es una herramienta poderosí­sima para explicarnos y protegernos del mundo. Pero cuando hablamos de género, es determinante", señala Delgado en una entrevista con la AFP.

Su trabajo incluye 'Los miserables', con el que optó al í“scar en 2013; 'Biutiful' (2010), de Alejandro González Iñárritu; 'La piel que habito' (2011), de Pedro Almodóvar; y 'Las brujas de Zugarramurdi' (2014), de ílex de la Iglesia.

"Tú puedes decir que eres una mujer atrapada en un cuerpo de hombre -o viceversa- y mientras no das el paso de cambiarte de ropa, nadie lo nota", apunta.

Lili comprendió que no podí­a seguir yendo en contra de su naturaleza el dí­a que se vistió de mujer para sustituir a la modelo de su esposa, la también pintora danesa Gerda Wegener -interpretada por la sueca Alicia Vikander-. Redmayne y Vikander optan al í“scar por su papel protagonista y secundario, respectivamente.

- De la cárcel a la libertad -

La transformación fí­sica, estética y mental de Lili fue imparable. "Las prendas rí­gidas, de cuellos exageradamente altos que ocultan el cuerpo como si estuvieran en una cárcel dan paso a formas mucho más fluidas, una coloración mucho más sensual, con materiales que se mueven, que expresan libertad", explica el modisto español.

La metamorfosis estética se acentúa cuando ambos personajes se mudan a Parí­s, capital en la década de 1920 de la moda, la cultura y las tendencias, donde Lili encuentra un espacio en la sociedad para experimentar y aprender a convivir en su nueva piel.

El resultado es impactante. Redmayne adopta con sorprendente naturalidad los rasgos femeninos de Lili.

"Creo que con Eddie hemos conseguido hacer una mujer real, creí­ble, sin apenas maquillaje; el pelo es suyo y no lleva ni prótesis de pecho ni de cadera", dice Delgado, sin esconder un cierto orgullo. "Vestirlo de mujer fue fácil, lo difí­cil fue vestirlo de hombre", afirma al recordar el proceso de creación de los bocetos, muchos inspirados en la estética del artista británico Quentin Crisp, icono gay de los 70.

La transformación de Lili acaba provocando la transformación de la propia Gerda, quien "descubre la tolerancia y eso se refleja en su ropa".

Al final, el vestuario contribuye a la liberación de sus protagonistas, según el diseñador.

"'La chica danesa' es un progreso a la libertad", subraya Delgado. "Espero que esta pelí­cula haya podido abrir los ojos a mucha gente sobre la realidad de las personas que son transgénero", deseó.