El candidato a gobernador de Texas, Beto O’Rourke, criticó al gobernador Greg Abbott durante una reunión sobre seguridad de las armas en Dallas el 1 de junio, tras el tiroteo en la escuela de Uvalde.

O’Rourke, demócrata y excongresista, se presentó en el Centro Recreativo Thurgood Marshall en la zona de Red Bird de Dallas. El acto también incluyó discursos de supervivientes de la violencia con armas de fuego.

Durante el evento, O’Rourke citó una serie de medidas de control de armas que apoya, incluyendo la comprobación universal de antecedentes, las leyes de bandera roja y las leyes de almacenamiento seguro.

También acusó a Abbott de no hacer lo suficiente para hacer frente a la violencia con armas después de los tiroteos masivos. Abbott busca actualmente un tercer mandato como gobernador del estado.

“Siempre que promete, va a haber alguna acción … pensamientos y oraciones no son suficientes esta vez”, dijo O’Rourke.

Luego dijo a los miembros de la audiencia: “La única manera de evitar otro tiroteo es votar”.

Durante el evento, O’Rourke también reafirmó su deseo de prohibir los llamados “rifles de asalto”.

O’Rourke atrajo la atención nacional durante su fallida candidatura presidencial en 2019 cuando declaró que quería confiscar los rifles deportivos AR-15 y AK-47 de posesión legal, pero durante su carrera para gobernador, había atenuado su retórica y comenzó a declarar su apoyo a la Segunda Enmienda, aparentemente en un intento de competir con Abbott.

La aparición de O’Rourke en Dallas se produjo poco después de que fuera escoltado fuera de la conferencia de prensa de Abbott el 25 de mayo después del tiroteo en la Escuela Primaria Robb en Uvalde que mató a 19 niños y dos adultos.

En esa conferencia, O’Rourke se acercó a la plataforma donde Abbott y varios otros funcionarios estatales estaban sentados en el escenario e interrumpió a Abbott, preguntando “¿Cuándo vamos a hacer algo?” antes de gritar: “No nos estás ofreciendo nada”.

Momentos antes, Abbott había dicho a la audiencia que antes de llegar al evento, había preguntado a los funcionarios de la ley en todos los niveles, “¿Cuál es el problema aquí?” a lo que todos habían respondido que el problema en la comunidad de Uvalde era “la enfermedad mental”.

O’Rourke también gritó que “el momento de detener el próximo tiroteo es ahora, y ustedes no están haciendo nada” antes de ser expulsado del auditorio.

Más tarde, en la rueda de prensa, Abbott señaló que los adolescentes de Texas han podido comprar armas durante décadas y dijo que el gobierno de Biden debe abordar los problemas de salud mental en todo el país.

“Cualquiera que le dispara a otra persona tiene un problema de salud mental. Punto”, dijo el gobernador. “Nosotros, como gobierno, debemos encontrar una manera de abordar ese desafío de salud mental y hacer algo al respecto”.

Se espera que O’Rourke siga centrando gran parte de su campaña en el control de las armas tras el último tiroteo masivo.

Antes de su aparición en Dallas el 1 de junio, el portavoz de la campaña de O’Rourke, Chris Evans, dijo en una declaración al Texas Tribune que el demócrata cree “que debemos actuar inmediatamente para prevenir el próximo tiroteo masivo dando prioridad a las reformas de seguridad de armas de sentido común que tienen un amplio apoyo bipartidista en todo el estado”.

“Esto incluye políticas populares como la derogación de la portación sin permiso, la aprobación de controles de antecedentes universales, la implementación de leyes de bandera roja, la promulgación de leyes de almacenamiento seguro y el mantener las armas de guerra en el campo de batalla mediante la prevención de su venta en nuestras comunidades”.

El 31 de mayo, Abbott emitió una declaración de desastre en Uvalde para acelerar los recursos estatales y locales que se pondrán a disposición de la comunidad tras el tiroteo.

Y el 1 de junio, el gobernador ordenó al Centro de Seguridad Escolar de Texas que llevara a cabo revisiones exhaustivas de la seguridad escolar para garantizar que todas las escuelas públicas del estado siguieran los procedimientos adecuados para maximizar la seguridad ante el nuevo curso escolar.

Abbott también pidió a los legisladores que empezaran a examinar y a elaborar recomendaciones legislativas sobre la seguridad escolar, la salud mental, las redes sociales, la formación de la policía y la seguridad de las armas de fuego, entre otras cuestiones, para evitar otro tiroteo masivo.

Una encuesta realizada en febrero por The Texas Politics Project de la Universidad de Texas en Austin reveló que el 43% de los texanos cree que las leyes sobre armas deberían ser más estrictas, mientras que el 34% dijo que deberían dejarse como están y el 16% quiere que sean menos estrictas.