19/Apr/2024
Editoriales

En EUA abundan los cómicos involuntarios

Cuando estaban los árabes y los judíos enfrascados en plena guerra en el año de 1948, el embajador norteamericano ante la ONU, Warren Austin (1877-1962) convocó a los dirigentes de las dos partes en pugna para que llegaran a un buen arreglo “como buenos cristianos”.

Eso ya era de suyo grave, pero luego el senador republicano estadounidense por Wisconsin, Alexader Wiley, remató el asunto al afirmar en tono solemne que “Los judíos y los árabes deberían acabar con su disputa, con el verdadero espíritu de la caridad cristiana”. Esta anécdota es importante porque evidencia que, como dijo Don Quijote, en todas partes se cuecen habas.