19/Apr/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Febrero 22 de 1913: Son asesinados sin miramientos a un lado de la Penitenciaría de la Ciudad de México, el presidente Francisco I. Madero, y el vicepresidente José María Pino Suárez. Estos crímenes se cometieron con toda alevosía pues ambos habían renunciado a sus puestos creyendo que les cumplirían la palabra de respetar sus vidas si se exiliaban en la Isla de Cuba. El espúreo Victoriano Huerta no honró su palabra ni su firma, enviando la orden de que “los quebraran” a ambos, asumiendo el poder y empezando una limpia nacional de todos los maderistas que estaban en posiciones relevantes, encarcelándolos a todos y enviando sustitutos de su confianza. Sin embargo, no fue lejos por la respuesta, pues Venustiano Carranza, con su plan de Guadalupe, inició el movimiento revolucionario constitucionalista, que con un ejército fuerte, lo derrotó. Esto permitió a México contar con una Constitución en 1917 que fue considerada como una de las más avanzadas del mundo en su momento.