España - El acuerdo que se rubricó en su día para adoptar medidas a raíz del proceso independentista, al amparo del artículo 155 de la Constitución española, establecía la vigencia de estas "hasta la toma de posesión del nuevo Gobierno" catalán. Este sábado (2.06.2018) juraron cargo los 13 consejeros sin problemas con la Justicia que conforman el nuevo gabinete catalán, por lo que la región podrá funcionar a partir de ahora sin la intervención de Madrid.

La casualidad ha querido que este trámite coincida con la entrada de un nuevo Gobierno en España. El socialista Pedro Sánchez prometió hoy su cargo como jefe del Ejecutivo ante el rey Felipe VI tras desbancar a Rajoy con una moción de censura motivada por la corrupción que salpica a su partido.

Prosigue el objetivo independentista

"Hoy se acaba el 155. Sin euforia", dijo Torra durante la ceremonia de toma de posesión de sus 13 consejeros, que tuvo lugar en el Palau de la Generalitat de Barcelona, sede del Gobierno catalán.  El nuevo presidente del Gobierno catalán reiteró su compromiso de avanzar "hacia un Estado independiente en forma de república". "No será un camino fácil. Hay intereses muy poderosos que quieren impedirlo", destacó.

Al grito de "¡Libertad!", los miembros del nuevo Ejecutivo mostraron prendas y lazos amarillos en recuerdo de los independentistas encarcelados provisionalmente y los que se están fuera de España. Entre estos últimos está el ex "president" Puigdemont, quien se encuentra en Alemania a la espera de que la Justicia de ese país decida sobre su entrega a España, donde -como el resto de ex miembros de su Gobierno- es investigado por sus planes de ruptura con España.

Durante la ceremonia de la toma de posesión de los consejeros, también se leyeron cartas de los presos y huidos y hubo reivindicaciones de la "república" catalana y protestas contra el Estado español y contra lo que consideran una "Justicia arbitraria". 

Los cambios de Gobierno en España y en Cataluña podrían abrir la puerta a una nueva etapa en medio de una crisis que tuvo su punto álgido el pasado octubre, cuando el Ejecutivo de Rajoy destituyó al "Govern" catalán de Carles Puigdemont después de que este impulsara una declaración para crear una república independiente en la región. Torra pide diálogo al Gobierno central, pero sin descartar su plan hacia una república independiente. Sánchez, por su parte, se comprometió esta semana a reestablecer las relaciones con la región.