27/Apr/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Septiembre 8 de 1844: Entra como presidente interino de la República el regiomontano Vicente Canalizo, en virtud de la licencia solicitada por motivos de salud de Antonio López de Santa Anna el día anterior. Eran los tiempos de la campaña contra Texas, la provincia separatista a la que Santa Anna decidió -fallidamente- someter para que no abandonara a nuestro país. Canalizo nació en Monterrey el 19 de agosto de 1794 y es el único nuevoleonés que ha llegado a ser presidente de la República. Aunque su Presidencia es históricamente cuestionada, en este interinato duró sólo unos días, pues hubo de marchar desde la Capital hasta Texas para asumir el mando de operaciones en la Guerra. Por ello, Santa Anna entregó el poder a José Joaquín Herrera en forma provisional y fue hasta el 21 de septiembre cuando Canalizo regresó a rendir su protesta como Presidente Interino de la República. Sin embargo, tres meses después -el 6 de diciembre de 1844- claudicó ante las protestas populares por el cobro excesivo de impuestos, que ya es de suyo, un desprestigio. Porque  anteriormente Canalizo ya había estado en la Presidencia de la República  también en forma interina, del 4 de octubre de 1843 al 4 de junio de 1844, apoyando a su amigo y jefe Santa Anna y publicó un decreto en el que daba el triunfo a los federalistas yucatecos, aceptando que pudiesen nombrar a sus autoridades (contrario a la Constitución centralista de las Bases Orgánicas) y liberaba a Yucatán de la obligación de enviar tropas y dinero para la guerra de Texas. Canalizo no tiene buen récord al frente de México, pero se debe considerar en su favor que fue leal a sus principios conservadores y centralistas, además de haber mostrado siempre lealtad a su amigo López de Santa Anna. Hoy lo recordamos como titular del Poder Ejecutivo nacional, pues se trata de un honor incomparable que, desafortunadamente para él, no siempre tuvo el final feliz que él y todos los regiomontanos quisiéramos.