Editoriales

En el mar la vida es más sabrosa

No es casual que el sueño de los millonarios sea irse a vivir a una isla. Esto se debe a que por lo general, el clima insular es más benigno que el clima continental. Esto se debe a que las islas están rodeadas totalmente de agua que atempera las altas y bajas del clima, haciéndolo más uniforme y suave.

También influye el hecho de que en las islas llueve con frecuencia, pues el mar y el sol absorben la humedad que se devuelve en forma de lluvia a la tierra. Adicionalmente ese mismo mar que rodea a la isla, hace que el clima no tenga cambios tan bruscos como en el continente, y así, en verano el mar absorbe gran cantidad de calor de la tierra y el aire, evitando las temperaturas extremadamente altas, y en invierno presta a la tierra y al aire el calor que almacenó durante el verano, moderando el frío.