20/Apr/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Agosto 27 de 1927: Llega a Monterrey Álvaro Obregón, durante su campaña para reelegirse como Presidente de la República. Se hospedó en el Hotel Internacional, realizó un mitin y visitó varios municipios de Nuevo León en plan proselitista. Su postulación movió el tapete al presidente Plutarco Elías Calles quien tenía decidido que otra persona, probablemente el general Serrano, sería su sucesor. Obregón hizo una inteligente interpretación al término reelección que marcaba la constitución de 1917 pues decía que no se reelegiría el presidente en funciones, y él no lo era pues su periodo presidencial había sido antes.

 El gobernador de Nuevo León Jerónimo Siller le daba el lugar que le correspondía políticamente al futuro gobernador Aarón Sáenz Garza, nuevoleonés muy cercano a Obregón, quien acompañaba al candidato. Otro personaje cercano a Obregón, el ex gobernador Porfirio G. González, quien había sido desaforado en 1925, se las ingenió para hacerse presente con un grupo de sus seguidores. El alcalde Jesús María Salinas Jr. hizo lo propio apoyando al candidato oficial del presidente Calles. El candidato Álvaro Obregón, con su oratoria pintoresca e inatacable pronunció un discurso pragmático refiriéndose en forma despectiva a sus adversarios, pero sin dar nombres. Al término de su visita, Obregón continuó con su campaña política que le dio el triunfo electoral en los comicios de 1º de julio de 1928. Su trágico final, ya como candidato electo será motivo de otro texto en su oportunidad.