Marzo 8 de 1910: Nace en San Buenaventura, Coahuila, Juan Manuel Elizondo Cadena, quien sería líder obrero y político de talla nacional. Vino a Monterrey a estudiar en el Colegio Civil,donde se vinculó con otros dos jóvenes enamorados del mismo sueño que él: Una Universidad propia del Estado de Nuevo León. En aquel momento sólo había escuelas superiores aisladas, y quien quisiera tener un título universitario registrado, debía viajar a México o a Estados Unidos.

Estos dos estudiantes amigos de Elizondo eran nada menos que Raúl Rangel Frías y José Alvarado Santos, quienes estuvieron más pegados en ese gran proyecto, mientras que Elizondo Cadena destacaba por su facilidad para redactar y pronunciar discursos políticos, así que se enroló con Las Juventudes Vasconcelistas, en torno a la posible candidatura a la presidencia de la República de José Vasconcelos.

Para ello, Juan Manuel Elizondo se fue a vivir a la ciudad de México, y en 1935 fue parte del Comité Nacional de Defensa Proletaria, y participó en la fundación de la CTM. Su ingreso al Sindicato de Mineros, Metalúrgicos y Similares le potenció su liderazgo pues terminó siendo en un breve lapso de cuatro años, el líder nacional. El presidente Ávila Camacho le dio juego político nombrándolo su asesor para la creación del IMSS, y después, en 1946 fue electo senador de la República por Nuevo León. Luego participó junto a Lombardo Toledano en la formación del Partido Popular.

El nombre de Juan Manuel Elizondo se escuchaba en todo el país como uno de los principales ideólogos del movimiento obrero siendo delegado de México ante la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Sin embargo, un líder obrero que no haya pisado la cárcel no puede considerársele como grande, así que Juan Manuel Elizondo fue preso en Cuba y en Holanda. Presentó en el Senado mexicano una iniciativa de ley para la existencia de Diputados de representación, partiendo del principio que el Poder Legislativo debe ser representativo de todas las corrientes políticas, no sólo de la mayoría. Fue recipiendario de la Medalla al Mérito Cívico del Estado de Nuevo León, de la Medalla “Alfonso Reyes” de la UANL, y del Primer Trofeo Regio en el año 2000. Murió en Monterrey en diciembre de 2009, estando a punto de cumplir un siglo de vida. La UANL incluyó su figura en el monumento de los tres grandes impulsores de la Universidad, sentados en una banca enfrente de la Torre de Rectoría, y quienes fuimos sus amigos nos consideramos afortunados.