Casi un centenar de personas han resultado heridas leves por las cargas de los Mossos d’Esquadra frente a la Delegación del Gobierno en Catalunya, donde miles de independentistas han tratado de desbordar el cordón policial en protesta por la detención del expresident catalán Carles Puigdemont. Según ha informado el Sistema de Emergencias Médicas (SEM) en su última actualización, han sido atendidas 98 personas por lesiones de carácter leve producidas durante los incidentes en las protestas en Barcelona.
Los Mossos d’Esquadra han detenido a seis manifestantes por los incidentes en los alrededores de la delegación del Gobierno en Catalunya, donde los antidisturbios han cargado y ha disparado salvas para evitar que algunos manifestantes, que les arrojaban objetos, rebasaran el cordón policial. Según han informado a Efe fuentes de la policía catalana, los detenidos han sido arrestados por un delito de atentado a la autoridad en la confluencia de las calles Valencia y Roger de Lluria de Barcelona, uno de los puntos de tensión entre Mossos d’Esquadra y los concentrados.
La concentración independentista que ha tenido lugar frente a la Delegación del Gobierno en Barcelona ha vivido momentos de tensión entre centenares de manifestantes que han protestado por la detención en Alemania de Puigdemont y los agentes antidisturbios de los Mossos d’Esquadra que conforman el perímetro de seguridad.
Algunos manifestantes han lanzando huevos, latas, algún bote de humo y pintura amarilla contra los agentes antidisturbios, que han efectuado algunas cargas y han disparado salvas para defender el perímetro de seguridad.
Roger Torrent reaccionó a la detención de Carles Puigdemont con un mensaje institucional este domingo por la noche, similar a los que hacía el presidente cesado el pasado mes de octubre. Durante su intervención acusó al Estado de “perseguir el corazón de la democracia”. “La hora es grave. La excepcionalidad, evidente”, apuntó el presidente del Parlament, que considera que “la democracia está por encima de todo, de cualquier interés” y aun así reclamó una salida política y dialogada a la situación que vive Catalunya e hizo un llamamiento a la calma, sin dejar de lado la firmeza de la respuesta.
A juicio de Torrent, que compareció con un lazo amarillo en la solapa de su americana y con la puerta abierta de fondo, lo que se está haciendo en Catalunya en estos meses es “un laboratorio para perseguir la disidencia en todas partes” y de ese modo se ponen “en riesgo los fundamentos de la construcción de Europa”, señaló.
Con los últimos encarcelamientos y la detención de Puigdemont, denunció, “no se persigue a personas, también se persigue la voluntad de los catalanas”. No obstante, hizo un llamamiento a la no violencia y a la vez a la firmeza. El president del hemiciclo, máxima autoridad de Catalunya por detrás del president de la Generalitat -puesto ahora vacante-, hizo un llamamiento a la calma y “a las respuestas cívicas, transversales, democráticas y pacíficas”. “Esta situación exige una salida política y no judicial. Es la hora de la política”, apuntó y recordó que siempre han ofrecido diálogo.