Monterrey.- Nueva legislatura, nuevas y…¿mejores relaciones?
Al menos así se vio entre el presidente del Congreso local neolonés Marco González y el gobernador Jaime Rodríguez Calderón en la instalación de los trabajos de esta LXXV legislatura.
A la llegada del mandatario luego de caminar por el pasillo del recinto y llegar hasta la sala de Sesiones saludando a los diputados más cercanos, se enfiló al estrado principal, ahí fue saludado por el Presidente Marco González, sí, el diputado con el que en la legislatura pasada tuvo sus enfrentamiento por distintos temas.
Marco lo recibió con un saludo de mano y un abrazo que parecía que había cierta reserva; se sentaron juntos como lo marca el protocolo legislativo pero bastaron unos minutos de iniciada la Sesión para que se empezara a relajarse el encuentro.
A ratos se vieron muy platicadores durante los mensajes de los legisladores de cada bancada, conversaron primero algo serios pero también mostraron su lado comodidad pues los captamos riéndose durante la conversación que sostenía que por momentos se extendía por varios minutos, luego había pausas y de nuevo regresaban a las pláticas.
Tan así que Marco le convidó de sus dulces que un asistente le pasó para estar saboreando durante la Sesión, se los puso frente al mandatario para que Rodríguez sólo extendiera la mano y al cabo de pocos minutos el Gober no desaprovechó el regalito, pues además ni había almorzado nada, sólo chicharrones que traía en su camioneta y ya eran las 12:00 horas.
Una de las confrontas que resonaron fue durante el primer informe de gobierno donde González reclamaba las promesas incumplidas de el Bronco a lo que el mandatario respondió que no se justificaría y es responsable pero también la federación y le recriminó que por qué no hablaba de su dirigente nacional, en eses momento Enrique Ochoa quien era un “diablito que se robó la luz”.
De los cuestionamientos más recientes González puntualizaba si Jaime mocharía las manos a sus funcionarios o también como al principio de la administración señalaba que Jaime había ganado porque estuvo en el momento idóneo, no porque fuera un líder ciudadano o como en abril del 2016 que señalaba que el ciego era el mandatario porque no quería ver lo que sucede en el estado en el tema de seguridad.
Hoy comienza una nueva legislatura donde ambos aseguraron en sus mensajes que sostendrán una mejor relación y por lo pronto en los próximos días podría haber una reunión entre los coordinadores de las bancadas con el gobierno del estado.