26/Apr/2024
Editoriales

Entrecurules 18 09 19

La sorpresa dada ayer por la diputada Claudia Tapia desde la Tribuna del Congreso local, despertó no sólo a los diputados, sino al público en general del aburrimiento en el que habían caído. Sí, porque la legisladora, quien sacó de balance al Coordinador del Grupo Legislativo de Morena, Ramiro González Gutiérrez, hizo que todos voltearan a verla para renunciar a la de Movimiento de Regeneración Nacional.

La legisladora con su renuncia, creó el Grupo Legislativo de Morena de la 4-T y casi de inmediato, el Presidente del Congreso, Juan Carlos Ruiz García, hizo la declaratoria correspondiente.

Por la inconformidad de Morena, el nombre, será discutido al interior del órgano máximo de Dirección del Congreso que es la Comisión de Coordinación y Régimen Interno (COCRI).

Desde la tribuna del Congreso local, Tapia dijo que no puede seguir en una bancada que tiene ideales diferentes a los del Presidente Andrés Manuel López Obrador.

"Mis principios y convicciones me impiden quedarme callada y seguir en esta bancada", expresó Tapia, mientras que desde su sitial, su ex compañera de grupo, Celia Alonso, la observaba enojada.
Y aunque la solicitud de cambio fue turnada a la COCRI, a Morena le pareció incorrecto que el Presidente del Congreso haya hecho la declaratoria correspondiente sin haber llegado todavía a ese órgano legislativo.

De su ronco pecho, Tapia acusó a su ex Coordinador Ramiro González, de obedecer a intereses de personajes de otros partidos, pero sin dar los nombres.
Y en sus desahogos, denunció que mientras estuvo en Morena, sus mismos diputados le bloquearon iniciativas y recibió regaños por hablar con la prensa.
Con la salida de Tapia de Morena, esta bancada se queda con siete diputados en lugar de ocho y de pasada el PRI reafirma su papel del grupo minoritario más importante en el Poder Legislativo.

Desde luego que después del anuncio de la renuncia, Ramiro González desmintió a Tapia al señalar que es mentira que reciba órdenes de otros jefes, pues según dijo, los únicos jefes nuestros son los ciudadanos.

Y surgió también la rebeldía del diputado de Morena, Luis Armando Torres, quien se apartó de los legisladores de Morena cuando Ramiro González desmintió a Tapia.

Le pidió por micrófono Ramiro a Luis Armando sumarse a ellos, pero él lo desobedeció, aunque aclaró que seguirá dentro de la bancada, haciendo que se respeten los principios de su partido.