28/Apr/2024
Editoriales

El Síndrome de la Piel de Elefante

El elefante africano es el mamífero más grande de la tierra. Puede pesar hasta ocho toneladas y medir hasta 3 metros de alto por 7 de largo. Con grandes orejas en forma de abanico y una larga trompa, se dice que el grosor de su piel es invulnerable en algunas áreas del cuerpo. Por otra parte afirma Jerry Van Amburg, afable peletero de Idaho, Estados Unidos, que el de los elefantes es el cuero más resistente a los pinchazos,

  En ocasiones la vida de un político se compara con la piel de esos mastodontes que pastan en selvas cálidas. Con sus respectivas similitudes y diferencias claro.

  El día de ayer nos enteramos a través de los medios masivos de comunicación, que el servidor público Federico Rojas Veloquio, secretario del Trabajo del “gobierno naranja”, y de profesión abogado, experto en materia laboral, tiene amplia experiencia en múltiples juicios donde en tribunales algunas veces ha perdido y otra más ha ganado, se sintió sentido amenazado y ofendido por un legislador panista.

 Al señor Rojas Veloquio se le conocía entre otras cosas, por su capacidad conciliadora entre las partes, para terminar los juicios laborales amigablemente sin llegar a las demandas, y con ello ayudar a que las juntas de conciliación no se sobredemanden y así ser más efectivas en tiempo, forma y espacio.

  Pero tristemente ahora que dejó de ser abogado postulante para convertirse en simple político, en la emproblemada administración del gobernante Samuel García, las actitudes cambian y le da ahora por hacerse el delicado y sufrido ciudadano atropellado por la oposición, al denunciar ante la Fiscalía General de Justicia en el estado al diputado Gilberto de Jesús Gómez Reyes, quien lo sorprendió hace días en una tienda de conveniencia para reclamarle el actuar de su trabajo.

  Por lo pronto: Se dice que un político —sobre todo aquel que trabaja al interior de un

gobierno—debe tener piel gruesa como elefante para aguantar lo que venga por delante.

   Debe tener orejas grandes para saber escuchar, colmillos grandes para defenderse de la adversidad, pies pesados para no perder el suelo y un gran olfato para saber lo que se avecina. También debe tener un peso considerable para dejar huella, cola pequeña para que no se la pisen y uñas cortas para evitar tomar lo ajeno.

 ¿Podrá el abogado Rojas Veloquio asumir su papel de servidor público, sin hacerse el mártir?

O sólo es una estrategia de medios para llamar la atención política, para que el líder natural de Movimiento Ciudadano en el estado, lo tome en cuenta para una candidatura en el 2024.

Comentarios a rodin2511@hotmail.com