02/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Mayo 7 de 1926: muere en Monterrey Serafín Peña Treviño, declarado en vida Benemérito de la Educación. Originario de la hacienda de San Sebastián de los Lerma ciudad Guadalupe, fue huérfano de padre cuando tenía un año de vida, pues Bernardino Ramón de la Peña –su progenitor- murió y Serafín aprendió sus primeras letras con su prima, maestra María de Jesús Treviño, y cursó su instrucción primaria en la escuela oficial de esa municipalidad. Se matriculó en el Seminario Conciliar de Monterrey y luego –en 1863- en el Colegio Civil, pero la invasión francesa suspendió sus estudios. Inició su carrera de educador como ayudante del licenciado Amado Valdés, y en 1864 se dedicó por completo a la educación. Abrió un colegio particular pero lo debió cerrar ante la presión oficial de no contar con el título de maestro. En 1867 Serafín Peña fue director de la Escuela de niños de Monclova y dos años después regresó a Monterrey y dirigió la escuela nocturna para adultos en 1869. En 1871 reabrió su colegio particular hasta 1884, que aceptó la dirección de una escuela particular en Bustamante. En 1886 regresó a dirigir el primer establecimiento público de educación para niños, cuando se fundaba la Escuela Normal para maestros. En 1890 fue designado inspector escolar luego de haber sustituido en la dirección de la Escuela Normal del estado, al ingeniero Miguel F. Martínez, nombre que la historia reúne con el suyo como los creadores de la ‘Escuela Neolonesa’. De 1901 a 1911 se desempeñó de nuevo al frente de la Normal del estado y fue nombrado Director General de Instrucción Pública, introduciendo la enseñanza de párvulos con maestros especializados en Estados Unidos. Con el gobernador Bernardo Reyes dedicó largas horas de su jornada diaria para escribir obras didácticas que sirven a los estudiantes y a los maestros para sistematizar su trabajo de enseñanza. Escribió deliciosos poemas y ensayos que frecuentan las páginas editoriales de publicaciones como El Obrero de Monterrey, de la Sociedad Mutualista de Obreros que él ayudó a fundar. Representó a Nuevo León en los Congresos nacionales de Instrucción pública celebrados en 1910 y 1911, y es en este último año cuando solicitó su jubilación, a solicitud del maestro colimense Gregorio Gómez Quintero, quien en un Congreso Nacional magisterial lo propuso siendo aprobada por unanimidad esta iniciativa. El gobernador Nicéforo Zambrano turnó la solicitud al Congreso del estado, y fue decretada el 8 de diciembre, siendo el primer maestro jubilado en la historia de Nuevo León, con un salario vitalicio de 2 mil 800 pesos mensuales, es decir, su salario íntegro como maestro activo. El 20 de mayo de 1918 Serafín Peña fue declarado Benemérito de la Educación, por el Congreso local, junto a don Miguel F. Martínez, y esa noche se realizó un festejo organizado por sus ex discípulos Joel Rocha, Fortunato Lozano y Antonio Moreno. Y es en otro mes de mayo, pero de 1926 cuando murió don Serafín Peña, pero su nombre está inmortalizado en calles, avenidas y múltiples escuelas del estado, como la Normal de Montemorelos que se llama Serafín Peña desde su fundación en 1946.