Ni con toda la crítica encima, ya sea de nivel nacional o internacional, el presidente López Obrador ha bajado de sus altísimos niveles de popularidad, es más, ahora que la pandemia ha cobrado una cantidad increíble de almas mexicanas, y la presencia de la violencia provocado por los narcos, el señor presidente va subiendo en su popularidad… entonces, para entenderle a esta situación, más vale que analicemos al pueblo de México, porque esas encuestas de popularidad no son sólo a electores, sino a población abierta… los mexicanos siempre hemos tenido el problema de que actuamos con los órganos internos, que son inferiores, no con el superior, es decir, con el cerebro… y no ha sucedido nada que nos haga cambiar de forma de actuar, porque México ha sobrevivido a esos amores inexplicables de los mexicanos con sus preferidos…///

Algo así como lo que sucede con los artistas que, sin importar su calidad, a algunos se les niega el cariño demostrándolo en la raquítica taquilla, mientras a otros sin mejor calidad se les entrega todo, compra de boletajes, y demostraciones públicas de cariño… por lo tanto, debemos aceptar que a la gente le encanta López Obrador, aunque no apruebe lo que hace, pues la gente está en contra del cierre del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México, en contra de la construcción de refinerías, del tren maya, etcétera… pero eso sí, cuando ve a López Obrador se obnubila y le otorga todo su cariño al grado de que si se pudiera, lo reelegirían por el resto de sus días…///

Ahora se especula que el gobernador electo, Samuel García, está viendo la posibilidad de nombrar a un secretario general de gobierno diferente a Hernán Villarreal, su segundo de a bordo… en realidad sería un desperdicio pues Hernán es un funcionario vivo y honesto, algo no tan fácil de encontrar, además trae la camiseta de Samuel tatuada al cuerpo… veremos y comentaremos…///