Editoriales

Las medias

El Imperio Romano era muy poderoso. Sus dirigentes se esmeraban en construir ejércitos que conquistaban todas las naciones que se proponían, y sus soldados eran temidos en todo el mundo. Sin embargo les faltaban calzones, pues esa prenda no formaba parte de la indumentaria de los romanos. Las películas han idealizado a la sociedad romana y a sus actores siempre los toman con ropa ligera, sobre todo si son mujeres.

Pero la realidad es que en Roma llueve y hace frío en invierno, por lo que la gente se abriga. Para cubrirse sus piernas se usaban unas vendas que se llamaban fascie feminalie si cubrían los muslos, y si cubrían toda la pierna eran fascie tibialiae. Cuando los romanos conquistaron a los persas, a los suevos, los galos y a los germanos, descubrieron que los pantalones son una prenda cómoda y comenzaron a usarlos. Al principio eran blancos o de color púrpura. Algunos llegaban hasta la rodilla, otros hasta el tobillo.

En su tiempo, los emperadores Arcadio y Honorio intentaron prohibir su uso, pero Tácito nos habla del general Cecina, diciendo que “… llegó a hablar a los togados vestidos con bragas”. Estas bragas se usaron en la Edad Media, hasta que en el siglo XIV las usaban sólo el populacho, porque los nobles usaban las calzas o calzones que se confundían a veces con las bragas. Las calzas iban desde la cintura hasta el pie, y algunas eran reforzadas con suela de cuero o plantillas de madera. Las mujeres las usaban a desde el siglo XVI las calzas eran de un color para una pierna y de otro para la otra pierna. Allí es cuando se empezaron a denominar “medias calzas”, para terminar llamándose sólo “medias”.