Internacional

Medios buscan acceso a niños en centros de detención en EEUU

NUEVA YORK  — En el centro del debate nacional en Estados Unidos sobre la política de inmigración, se ha escuchado mucho últimamente de los niños separados de sus familias, pero rara vez han sido vistos. Organizaciones de prensa dicen que todos los días batallan con las restricciones del gobierno de Donald Trump al acceso a las instalaciones en las que están los niños que son separados de sus padres.

Las notas entregadas por el gobierno satisfacen a pocos y ha habido disputas en algunos de los pocos casos independientes en los que emerge una idea de lo que está sucediendo en la frontera con México.

El lunes por la noche, durante el programa de Rachel Maddow en MSNBC, se transmitió un nuevo video que presuntamente mostraba a niños pequeños en una instalación del gobierno en la ciudad de Nueva York. Maddow dijo que fue grabado subrepticiamente por un empleado que posteriormente renunció y que desea preservar el anonimato.

“No es suficiente que el gobierno provea imágenes preparadas”, dijo Noah Oppenheim, presidente de noticias de la NBC. “El público espera y demanda y tiene el derecho a ver lo que está sucediendo en esos centros de detenciones y cómo se está implementando esa política en su nombre”.

Luego que varios reporteros fueron autorizados a visitar _sin sus cámaras_ una instalación de detenciones en Texas, el gobierno objetó sus descripciones de recintos cercados, como si se tratara de jaulas. Una fotografía de una niñita hondureña cuya madre fue detenida cuando cruzaba la frontera a Estados Unidos se volvió un símbolo para muchos de la política de separaciones _ahora revertida_, en gran parte porque había muy pocas imágenes disponibles. El gobierno dijo el viernes que la niña y la madre fueron reunidas de nuevo y que estaban detenidas juntas.

Los llamados de acceso de la prensa chocan con la política establecida de no permitir fotografías de menores bajo custodia del gobierno, que las autoridades federales han aplicado a los niños inmigrantes. El Departamento de Salud y Servicios Humanos cita una política de 2015 que prohíbe cámaras, entrevistas con niños o visitas sin aviso previo de dos semanas. El Departamento alega que por su edad, los niños son vulnerables a abusos.

Si el gobierno quiere negociar, existen formas de establecer reglas para proteger los intereses de las dos partes. Por ejemplo, a menudo se permite que periodistas se desplacen con unidades militares con la promesa de que no revelarán estrategias ni movimientos de tropas. CBS News está dispuesto a negociar, aunque el editor de estándares Al Ortiz dijo el lunes que CBS transmitió una historia que mostraba a niños inmigrantes que eran transportados fuera de instalaciones, con algunos rostros visibles para las cámaras. “De otra forma, tenemos una historia sin rostros”, dijo Ortiz.

Desde el punto de vista del gobierno, la restricción reduce las presiones, dicen expertos en comunicación social. Un audio obtenido por ProPublica, de niños llorando en una instalación federal, influyó en la decisión de Trump de cambiar su política, aunque nunca hubo un video.

“En general, el objetivo es desmitificar las cosas, porque la imaginación se dispara si lo permites”, dijo Joel Johnson, que trabajó en la Casa Blanca del presidente Bill Clinton y en el Capitolio. Ahora es director del Glover Park Group, que incluye asesoría sobre crisis. “Lo fundamental es si lo que está oculto es peor que lo que se imagina la gente. En ese caso no permites que la gente vea tras la cortina”.

Los funcionarios a cargo de prensa quieren controlar el mensaje y “poner una cámara en la cara de niñitos pequeños no es forma de controlar el mensaje”, dijo Erin Pelton, que trabajó en la Casa Blanca y la ONU y ahora dirige la firma Mercury en Washington DC.

Aunque dicen que entienden por qué el gobierno tiene esa posición, afirman que está destinada a fracasar, porque inevitablemente más imágenes saldrán a la luz.

Así quedó evidenciado el lunes en el programa de Maddow. El video mostrado allí incluía a una niñita llorando que dijo que se llamaba Jessica. Dijo que quería hablar con su mamá, que ella pensaba estaba en Virginia. Le habló en español a la mujer que tomó el video y que renunció a su puesto más tarde.

También se oía a otra mujer, hablando en español y diciendo a los niños que no hablaran con los reporteros.

La mujer que suministró las imágenes es representada por Michael Avenatti, el mismo abogado de Stormy Daniels, la actriz porno que dice haber tenido una relación sexual extramarital con Trump. Avenatti dij que está representando a varias familias afectadas por la nueva política de inmigración.