Estos apagones de energía eléctrica nos cuestan un ojo de la cara, pues la productividad nacional y local se cayó en forma estrepitosa, y las clases se suspendieron, amén de el descontrol en las vidas de todos… lo peor es que los apagones repercutieron o coincidieron con el abasto de agua domiciliaria, pues hubo también una falla o accidente en la mera empresa de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey… el resultado fue una tormenta perfecta en contra de nuestro sistema de vida…///

Nos demuestra que la vulnerabilidad de nuestro entorno es realmente grande, pues nomás imagine usted si se hubieran dañado las comunicación de internet lo que pudo desatarse… desde luego que los mexicanos no vamos a culpar al gobierno de López Obrador, porque el problema se generó en Estados Unidos que dejó de vendernos gas natural… y ahí es donde se ven los errores del manejo gubernamental, porque la política actual es matar la inversión en energía alterna como es la eólica y la solar, pues “se ven feas” las torres generadoras…///

Sin embargo, la indulgencia con este gobierno no tiene límites, pues nomás recuerde usted cómo le fue a Miguel de la Madrid con el terremoto de la Ciudad de México… nadie podía culparlo por el suceso, pero dijeron que se había tardado en reaccionar dos días, y con eso fue suficiente para crucificarlo, a él y a su partido… las diferencias en el rasero para medir a los gobiernos son espectaculares… ¿usté cómo la béisbol?...///

Al término de este gobierno, si sobrevivimos usted y nosotros, el país va a quedar peor que como quedaron las ciudades de Hiroshima y Nagasaki luego de las explosiones atómicas de hace tres cuartos de siglo… ciertamente no todo es culpa del actual gobierno, pero le tocó esa circunstancia y la política es circunstancial, porque ahora no tenemos la economía que teníamos, la salud que teníamos, la productividad que teníamos, ni la educación que teníamos… Dios nos agarre confesados…///