20/Apr/2024
Editoriales

Los nombres comerciales

Es enorme la influencia que tienen los nombres en las personas, son parte cardinal de su personalidad. Y en el comercio no lo es menos pues, yéndonos al extremo, nadie compraría un comestible si su nombre comercial significara suciedad. Es por eso que las marcas comerciales son producto de estudios de mercado para identificar su aceptación.

Aunque existen marcas que simplemente son el nombre del inventor o del propietario como sucede en los casos de Harley Davidson, que corresponde a los dos fabricantes de su primera motocicleta; o la automotriz Toyota, cuyo creador es Kiichiro Toyoda, solo con el cambio de una letra para su mejor pronunciación, o de plano el apellido completo como es el caso de los productos Jacuzzi.

También hay algunos nombres que son el lugar de origen del producto como es Nokia, creado a orillas del río Nokia en Finlandia, por una empresa que fabricaba otros productos hasta 1963 que entró al mercado con el primer radioteléfono, y ahora está en las telecomunicaciones. O la cerveza Budweiser que se preparó en la aldea alemana de Budweis y registrada en EUA. Pero hay también nombres comerciales que son producto de un error, como los estudiantes de Stanford que registraron el nombre de Google, queriendo escribir Googol que, según el matemático Kasner, se llama así el número 10 elevado a 100.