El vicepresidente de Bolivia, ílvaro García Linera, presentó el 25 de enero en una rueda de prensa, una perspectiva muy optimista del potencial que tiene el Corredor Ferroviario Bioceánico Central (CFBC), que cuando se construya conectará el puerto peruano de Ilo en el Pacífico, con el puerto brasileño de Santos, pasando por Bolivia. Mientras García Linera hacía su presentación, en Berlín, Alemania, se reunían los ministros de Obras Públicas de Paraguay y Bolivia, Ramón Jiménez Gaona y Milton Claros, respectivamente, acompañados del vicepresidente y ministro de Transporte del Perú, Martín Vizcarra, con el secretario de Transporte e Infraestructura Digital de Alemania, Rainer Bomba, para hablar sobre el financiamiento de ese proyecto.
Cuando esté construido el CFBC, explicó García, "el tren bioceánico no sólo va a conectar el eje central de nuestro país con un sistema moderno de ferrocarriles, sino que va a conectar las economías brasilera, paraguaya, parte de la argentina, con la economía del Perú y las economías del Pacífico, de Asia, fundamentalmente China, Corea, Japón e India, que es ahora el nuevo epicentro del dinamismo económico del siglo 21", informó el canal noticioso boliviano Abya Yala-TV.
El financiamiento para el CFBC, que tiene un costo estimado de $10 mil millones de dólares, todavía está por precisarse. En diciembre pasado, el embajador de China en Bolivia, Wu Yunshuan, dijo que China quiere colaborar con este proyecto, e indicó que podría ofrecer "hasta" $40 mil millones de dólares para financiarlo, pero que esto dependería de la extensión y la calidad del proyecto. En su presentación, García Linera señaló que "China ha reiterado en varias ocasiones" su voluntad de financiar este proyecto. Asimismo, informó que espera concretar las negociaciones con Brasil en los próximos meses. La participación de Brasil está congelada desde que en agosto pasado le dieron un golpe de Estado a la Presidente Dilma Rousseff.
Al concluir la reunión en Berlín, Rainer Bomba prometió que su gobierno "dará pleno apoyo" al proyecto bioceánico, y se comprometió a "buscar inversionistas" que lo financien. Anunció también que su despacho establecerá oficinas en uno de los tres países involucrados en el proyecto, a fin de coordinar más de cerca todo lo concerniente al CFBC. Aparte de los funcionarios del gobierno alemán, también participaron en la reunión ejecutivos de compañías ferroviarias alemanas y suizas, en representación de Fichtner, Molinari Rail AG, Stadler Pankow GMBH, y Gauff.