“Mereces un amor que te quiera despeinada, con todo y las razones que te levantan de prisa, con todo y los demonios que no te dejan dormir…

Mereces un amor que se lleve las mentiras, que te traiga la ilusión, el café y la poesía.” –Frida Kahlo-

Cuando alguien no te trate como te mereces es mejor partir… Aun con miedo, aun con dudas y aun con infinito dolor.  Créeme, a pesar de que los nuevos horizontes sean totalmente inciertos, la vida te pondrá en un mejor lugar, donde el mañana que te entregará será sin mentiras, con café y poesía.

Es verdad que ninguna relación de pareja es perfecta; sin embargo, toda mujer merece cariño, respeto y un hombre a su lado que no sea un príncipe azul pero si ¡todo un caballero!

La realidad en toda relación sentimental no se vive en la etapa de cortejo, esa, es la fase más falsa y mentirosa de todas, ya que, ambas partes sólo mostrarán cualidades increíbles y ocultaran sus peores defectos. Para poder amar verdaderamente a alguien primero debes aprender a amar sus defectos… a enamorarte de ellos. Como bien dice un conocido refrán: “Más vale malo conocido que bueno por conocer.” Dicho refrán es una llamada de precaución puesto que afirma que no es conveniente arriesgar lo que se tiene seguro o se conoce por algo que supuestamente es mucho mejor. Sin embargo, si aquello que conoces es sumamente malo o te lastima, más vale echarse a correr.

No se puede amar a alguien que constantemente se muestre indiferente o que hiera profundamente tus sentimientos y precisamente por esa razón. Suele pasar, lamentablemente situaciones así suceden con frecuencia y es en estos casos donde aplica otro conocido refrán: “Nadie sabe lo que tiene hasta que lo ve perdido.”

Los refranes, son consejos no pedidos que algún día alguien lanzó al aire. Consejos que encierran una gran sabiduría y que en ocasiones es importante escuchar.

Quien lastima en exceso o con frecuencia a otra persona -sin motivo o razón-, irremediablemente se arriesga a perderlo todo, porque como sabiamente dice otro conocido refrán: “Hasta el corazón más enamorado se cansa de ser tan lastimado.”

Al amor puedes irlo matando lentamente si esa es tu decisión. Es mentira que lo mates sin querer o sin ninguna intención. No obstante, por increíble que parezca, hay amores que pueden volver a renacer. Son como el ave fénix.

No todos los amores podrán levantarse de entre las cenizas, algunos morirán para siempre, tal vez la mayoría; sin embargo, el corazón que ha sido herido de muerte, una vez que se ha marchado y después de mucho tiempo, será el único que tendrá el poder de decidir si desea renacer nuevamente.