El asesinato del general de división Qasem Soleimani, comandante de la Fuerza Quds del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, por un ataque aéreo estadounidense en el aeropuerto de Bagdad provocó conmociones en toda la región. En Moscú, la noticia sorprendió a los políticos y diplomáticos, ya que Rusia ha estado luchando durante más de cuatro años en Siria junto con Irán y el gobierno sirio del presidente Bashar al-Assad.

Condenando lo que llamó "un acto aventurero", una  declaración del Ministerio de Relaciones Exteriores  dijo: "La medida de Washington está cargada de graves consecuencias para la paz y la estabilidad regionales. Consideramos que tales acciones son perjudiciales para encontrar soluciones a problemas complejos de Medio Oriente y más bien contribuyendo a la escalada de la violencia ". 

Más tarde, el  ministerio también dijo : "Soleimani sirvió devotamente los intereses nacionales de Irán". 

El presidente del Comité de Asuntos Exteriores del Senado ruso, Konstantin Kosachev,  escribió en Facebook sobre lo que el asesinato podría significar para el presidente Donald Trump, los Estados Unidos y la región. “El asesinato del general Soleimani en Bagdad de ninguna manera contribuye a mejorar la situación en Irak y todo el Medio Oriente. Sin embargo, sus implicaciones negativas ya son obvias ”, dijo Kosachev.

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Añadió: "Primero, las represalias de Irán seguirán inevitablemente. No quisiera profetizar, pero los ciudadanos estadounidenses pueden ser asesinados . No es de extrañar que el Congreso esté preocupado y la [Presidenta de la Cámara de Representantes] [Nancy] Pelosi exige que Trump informe por qué los ataques no fueron autorizado por el Congreso. En segundo lugar, esto significa que Trump no logra resolver sus problemas internos: si la escalada resulta en bajas [estadounidenses], sus calificaciones bajarán. En tercer lugar, los aliados estadounidenses en la región están preocupados: Israel ya está discutiendo las implicaciones de la operación por sí misma. Finalmente, las sombrías esperanzas que aún existían para el  JCPOAahora han sido bombardeados por completo. Irán ahora puede aumentar su producción de armas nucleares, incluso si no tenía tales planes antes ”. El JCPOA es el Plan de Acción Integral Conjunto, el acuerdo nuclear de Irán que Trump retiró en 2018.

A finales de julio de 2015, Soleimani llegó a Moscú para una visita confidencial con una misión crítica para involucrar a Rusia militarmente en la crisis siria. En ese punto, el ejército sirio aparentemente estaba en sus últimas etapas. La Fuerza Quds, el Hezbolá libanés y otras milicias chiítas ayudadas por Irán estaban ayudando a Damasco, pero todos carecían del poder aéreo para lograr un cambio decisivo en el terreno.

El viaje de Soleimani es visto como un hito para la participación proactiva de Rusia en la región.

Soleimani haría al menos un viaje más a Moscú, en febrero de 2017. Según los informes, esto  era para  discutir la cooperación bilateral de Rusia con las monarquías sunitas del Golfo Pérsico. Sus reuniones con los principales líderes de inteligencia militar rusa le ganaron una reputación en Moscú de ser un astuto pensador y hacedor estratégico.

Las dos conclusiones principales para Moscú del asesinato de Soleimani hasta ahora son si Teherán puede encontrar un reemplazo adecuado para él y quién dirigirá ahora una docena de grupos de milicianos que operan en Siria.

Konstantin Bogdanov, miembro del Instituto de Economía Mundial y Relaciones Internacionales de la Academia de Ciencias de Rusia, dijo a Al-Monitor: “Soleimani estaba a cargo de las operaciones militares y clandestinas iraníes en todo el Medio Oriente. Pero una de sus principales tareas fue coordinar y gestionar grupos bastante sueltos y diversos de milicias iraníes que luchan en Siria del lado del presidente Assad. Soleimani se hizo un nombre como un líder eficaz y confiable con el que el ejército ruso podría resolver problemas prácticos en el terreno ”. 

Bogdanov agregó: “Cabe señalar que un número acumulado de combatientes en las milicias pro iraníes casi iguala al Ejército Árabe Sirio y en sus cualidades de combate, tal vez, incluso supera a la SAA. La presencia de estas milicias complica los problemas de soberanía siria y la libertad de movimiento para Damasco. Pero al menos durante algún tiempo [la pérdida de Soleimani] probablemente complicará la capacidad de Irán para influir en Assad. En estas circunstancias, Rusia, tal vez, debería adoptar una postura más proactiva al establecerse como el principal mediador en el asentamiento sirio y un patrocinador de los acuerdos entre las partes beligerantes ". 

El coronel retirado Viktor Mukrakhovsky, editor de la revista militar Arsenal Otechestva (Arsenal Nacional), dijo que la decisión de Trump de matar a Soleimani abre un nuevo capítulo en la confrontación entre Irán y Estados Unidos. “Un estadista es asesinado, un representante oficial de su país que es miembro de la ONU y con el que Estados Unidos no está oficialmente en estado de guerra. Fue asesinado en el territorio de un tercer país. Esta no es una lucha encubierta de los servicios de inteligencia. Por lo tanto, Estados Unidos ha cometido abiertamente un acto de venganza y se enorgullece de este 'logro'. Está probando la reacción de la comunidad internacional en general y del liderazgo iraní en particular. Tras los fracasos en Venezuela, Siria y las conversaciones con Corea del Norte,

Maxim Shepovalenko, subdirector del Centro de Análisis de Estrategias y Tecnologías con sede en Moscú, dijo a Al-Monitor: "Lo que Estados Unidos no pudo entender, bajo su propio riesgo y riesgo, es el hecho de que el difunto mayor general Gen. Qasem Soleimani no era un señor de la guerra ni un jefe, sino un hombre con poder soberano. Si le disgustaba o no. 

Shepovalenko agregó: "Los iraníes son lo suficientemente inteligentes como para entender que 'la venganza es un plato que se sirve frío'". 

Rusia está calculando las posibles consecuencias tanto para su presencia regional como para su propia confrontación con Estados Unidos en posibles conflictos futuros.

Kosachev hizo referencia a las confrontaciones de Estados Unidos a lo largo de los años con hombres fuertes en varios países como Saddam Hussein de Iraq, Slobodan Milosevic de Serbia, Viktor Yanukovich de Ucrania y el coronel de Libia Moammar Gadhafi al escribir sobre el asesinato de Soleimani. “Este es un gran error derivado del hábito típico estadounidense de personalizar cualquier problema. Saddam (Milosevic, Yanukovich, Gadafi ...) debería ser eliminado y las cosas se calmarán. Pero esta es la lógica de un espectáculo, no la de la política. No funciona a largo plazo, pero puede ser un boomerang contra los directores del 'show' ”, concluyó Kosachev.