"Voy a ser un terrorista", aseguró con frialdad Youssef Zaghba hace un año a las autoridades aeroportuarias de Bolonia cuando se disponí­a a viajar a Turquí­a, paso previo para llegar a Siria, escenario de lucha del Estado Islámico. Así­ lo reveló este martes el diario italiano Repubblica, abriendo la controversia sobre si la inteligencia británica contaba o no con antecedentes del tercer yihadista identificado del atentado en Londres.

Cuando Scotland Yard reveló este martes los datos sobre Zaghba, se apuró en aclarar que no era "sujeto de interés" de la Policí­a británica ni de los servicios secretos MI5. No obstante, un oficial italiano aseguró a The Guardian que las autoridades de su paí­s alertaron a sus colegas en Londres cuando el í­talo-marroquí­ de 22 años se mudó a la capital británica. Lo mismo fue reportado por el periódico romano, que aseguró que un reporte completo fue enviado en abril del año pasado al Mi5.

Zaghba, quien llegó con nerviosismo a hacer los trámites previos al vuelo que pretendí­a abordar en marzo de 2016, no tuvo reparos en revelar su objetivo al viajar a Estambul. Por ello, la policí­a intervino para evitar que embarque. Aunque quedó acusado de terrorismo internacional, luego fue absuelto del cargo y dejado en libertad. Posteriormente, quedó incluido en Italia en la lista de personas potencialmente peligrosas para la seguridad del Estado, y por ello las autoridades alertaron al Reino Unido cuando supieron de su traslado.

Las fuerzas de seguridad británicas han sido fuertemente cuestionadas al revelarse que Khuram Butt, uno de los terroristas, habí­a sido objeto de investigación en 2015 pero que la Policí­a habí­a decidido después rebajar la pesquisa. La polémica surgió al revelarse que Butt apareció en un documental emitido en 2016 por el canal 4 de la televisión británica sobre las actividades de radicales islámicos.

Además, Transport for London (TfL), responsable de la red de transporte de la ciudad, confirmó que Butt trabajó para el Metro de Londres durante varios meses haciendo prácticas como asistente de atención a los usuarios, pero que se marchó el pasado octubre.

En la filmación se puede ver al terrorista desplegando una bandera del Estado Islámico en un parque de Londres junto con otros extremistas radicales.

Tras las crí­ticas, el asistente del comisario de las fuerzas del orden de Londres, Mark Rowley, defendió su actuación y resaltó que no habí­a información previa que indicase que planease un atentado.