Internacional

La calidad del aire es desastrosa en la mayoría de ciudades del mundo

Ginebra - En torno al 80% de las personas que viven en zonas urbanas están expuestas a niveles de calidad del aire que no respetan los lí­mites fijados por la Organización Mundial de la Salud (OMS), según un estudio publicado este jueves.

"Aunque todas las regiones del mundo se han visto afectadas, los habitantes de las ciudades de renta baja son quienes más sufren las consecuencias", alertó la OMS.

Según este estudio, el 98% de las ciudades de más de 100.000 habitantes en paí­ses de renta baja o intermedia no respetan las lí­neas directrices de la OMS en términos de calidad del aire. En los paí­ses de renta alta, ese porcentaje cae al 56%.

La contaminación del aire, debido a concentraciones elevadas de pequeñas partí­culas (MP10) y de partí­culas finas (MP2,5), que contienen sulfato, nitratos y carbono negro, supone el principal riesgo medioambiental para la salud.

La polución aumenta el riesgo de accidente vascular cerebral, de cardiopatí­a, de cáncer de pulmón y de enfermedades respiratorias agudas, especialmente asma, y provoca más de tres millones de muertes prematuras al año en el mundo, subrayó la OMS.

"Cuando el aire contaminado envuelve nuestras ciudades, las poblaciones urbanas más vulnerables -los más jóvenes, los más viejos y los más pobres-, son los más afectados", insistió la doctora Flavia Bustreo, subdirectora general de la OMS encargada del departamento de Salud de la Familia.

Según los expertos, que han comparado los niveles de partí­culas finas en 795 ciudades de 67 paí­ses, los niveles mundiales de contaminación atmosférica en el medio urbano aumentaron un 8% entre 2008 y 2013.

Los niveles más elevados se encontraron en los paí­ses de renta baja o intermedia del Mediterráneo oriental y del sureste asiático, donde los niveles anuales medios son en ocasiones de cinco a diez veces superiores a los lí­mites fijados por la OMS.

Según un cuadro elaborado por el organismo internacional, Riad, Nueva Delhi, El Cairo y Pekí­n se encuentran entre las ciudades con el aire más cargado de partí­culas MP10.

En Europa, los niveles de concentración de partí­culas finas y ultrafinas son prácticamente las mismas en Londres y en Ginebra y ligeramente más elevadas en Parí­s y en Roma.

Para mejorar la calidad del aire, la agencia de la ONU recomienda limitar las emisiones industriales, aumentar el uso de energí­as renovables y dar prioridad al transporte público y las ví­as ciclistas.