AMíN - Cazas presuntamente rusos atacaron un puesto controlado por fuerzas rebeldes moderadas en el noroeste de Siria, cerca de un importante cruce fronterizo con Turquía, y dejaron al menos un combatiente muerto y varios heridos, dijeron el domingo dos fuentes rebeldes.
Agregaron que varias incursiones nocturnas tuvieron como blanco a Babeska, una aldea en la provincia de Idlib que se ha convertido en un refugio para varios grupos del Ejército Libre Sirio, principalmente Jaish al Islam, un importante grupo insurgente que controla el último gran bastión rebelde cerca de la capital siria.
Jaish al Islam fue uno de los firmantes de un frágil cese al fuego mediado por Rusia y Turquía a fines del año pasado. Los rebeldes afirman que Rusia no logró presionar al Gobierno sirio para asegurar que se mantenga el cese al fuego.
El Gobierno sirio considera a Jaish al Islam como un grupo terrorista y lo culpa, junto a otros insurgentes, de realizar ataques recientes contra áreas controladas por el Gobierno en la capital, Damasco.
La aldea también alberga a cientos de familias y combatientes del suburbio capitalino de Daraya, que fue evacuado por rebeldes y cuyo control fue entregado al Gobierno el año pasado.
Aviones de combate que también se cree que serían rusos atacaron el poblado de Urum al Kubra en el campo al oeste de Aleppo, controlado por rebeldes, donde murieron cinco civiles en una zona donde hubo enfrentamientos entre rebeldes y el Ejército sirio, dijeron rebeldes.
