25/Apr/2024
Editoriales

Febrero 11 de 1828: el bergantín mexicano "Guerrero" se enfrenta en combate a la fragata española "Lealtad" en el Golfo de México

Febrero 11 de 1828: el bergantí­n mexicano "Guerrero" se enfrenta en combate a la fragata española "Lealtad" en el Golfo de México. La embarcación mexicana es capturada y llevada a La Habana, Cuba, en donde es rebautizada para llamarle "El cautivo" y nunca se recupera. El dí­a 1 de febrero anterior, "Guerrero" al mando del capitán David Henry Porter, habí­a abatido al bergantí­n español Marte y a la goleta española Amelia, que custodiaban una flota de 25 barcos que hubieron de refugiarse en el litoral cubano.

Este acontecimiento que hoy recordamos, cierra el capí­tulo de enfrentamientos marí­timos entre buques mexicanos y españoles. Pero el ambiente polí­tico que privaba en México era desastroso pues precisamente el dí­a 7 de enero anterior habí­a iniciado una nueva rebelión en Veracruz el general Miguel Barragán apoyando el Plan de Montaño, pero a los primeros enfrentamientos con el ejército del presidente Guadalupe Victoria, Barragán –reconociendo su inferioridad militar- se refugia en la Hacienda Manga de Clavo, propiedad del general Santa Anna.

Antes, en febrero, el general Manuel Mier y Terán habí­a ido a Texas al frente de la comisión de lí­mites fronterizos para el trazo de la lí­nea que limitaba el territorio mexicano, de acuerdo con el Tratado Adams – Oní­s de 1819, y en su recorrido por ese nórdico estado mexicano, advierte que la proporción de extranjeros y mexicanos ya es de nueve a uno, y además que esos extranjeros querí­an separar a Texas de Coahuila, pues ambos formaban el estado de Coahuila y Texas.

Así­ que España, enterada del desastre polí­tico que privaba en México, con revueltas militares y ambiciones polí­ticas desatadas que amenazaban con una ingobernabilidad absoluta, comienza planear cómo reconquistar a México, paí­s que habí­a conseguido su independencia en 1821 pero que en 1825 habí­a tenido que recuperar a sangre y fuego el fuerte de San Juan de Ulúa pues eran españoles los que habí­an controlado esa estratégica posición veracruzana. Al año siguiente, en 1829, llegarí­a a nuestro paí­s la expedición española con Isidro Barradas al frente con la intención de reconquistar lo que habí­a sido La Nueva España y a partir de ahí­, lanzarse a rescatar sus antiguos dominios en toda América.

Desde luego que fracasó España, pues el 11 de septiembre de 1829, el general Antonio López de Santa Anna los derrotó. Nuestra historia de ese siglo es rica en aconteceres, pero lamentable pobre desde el punto de vista nacionalista, pues se perdió mucho tiempo, dinero, esfuerzo y sobre todo, muchas vidas en busca de las definiciones polí­ticas. En estos tiempos de siglo XXI en que hemos avanzado tanto, no podemos darnos el lujo de permitir que regrese ese ambiente de inquietudes polí­ticas apasionadas que no llevan más que a arrebatarnos la paz y a mermar la boca bajeada economí­a que tenemos. Hoy habrá una gran marcha nacional convocada por instituciones de buena fe, esperemos que no sea aprovechada esta movilización ciudadana por los grupos polí­ticos que buscan sembrar odio entre mexicanos para una vez más, debilitarnos y ser presa fácil de los grandes lobos internacionales.