01/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Marzo 4 de 1929: se funda el ahora llamado Partido Revolucionario Institucional. Reunidos en casa del ingeniero chihuahuense Luis L. León, luego de su último informe presidencial, Plutarco Elías Calles anunció el nacimiento de una nueva era política en la que quedaba atrás el México de caudillos para nacer un México de instituciones. Estaban presentes: el sonorense y casi ex presidente Calles, el coahuilense Manuel Pérez Treviño, el potosino Gonzalo N. Santos, el nuevoleonés Aarón Sáenz, el tamaulipeco Emilio Portes Gil, el campechano José Manuel Puig, el veracruzano Manlio Fabio Altamirano, y el oaxaqueño David Orozco, representantes de las corrientes políticas más importantes.

Se acordó reunirse con los dirigentes de los cientos de partidos políticos que existían en México, para incorporarlos a todos a una nueva fórmula incluyente en la que todos tendrían su espacio a condición de que dejaran las armas para siempre y se dedicaran a fortalecer al país en la productividad de la tierra, la industria y el comercio, en fortalecer la educación pública y acceder a mejores niveles de seguridad social. Siempre con la vigilante presencia de Plutarco Elías Calles, llegaron a un acuerdo y el 4 de marzo de 1929 rindió protesta la primera Directiva del Partido Nacional Revolucionario, PNR, con Manuel Pérez Treviño en la presidencia; en la secretaría general, el ingeniero Luis L. León; en la secretaría de organización, nuestro paisano Aarón Sáenz; en la secretaría del interior, Basilio Vadillo; en la 2ª secretaría de organización, David Orozco; en la 3ª secretaría de organización, Bartolomé García; y como secretario de prensa y propaganda, Manlio Fabio Altamirano. Pero después, en 1938 rompieron el presidente Lázaro Cárdenas y el caudillo Plutarco Elías Calles, derivando en la salida del país de este último y en consecuencia se hicieron, entre otros cambios, la llamada refundación del partido que cambió de nombre a Partido de la Revolución Mexicana PRM. Posteriormente, en 1946, al terminar el presidente Manuel Ávila Camacho -al inicio del fenómeno económico conocido como Milagro Mexicano- se volvió a transformar el partido para denominarse Partido Revolucionario Institucional, cuyo primer candidato presidencial fue Miguel Alemán Valdés.

El PRI fue el único gran partido hegemónico del mundo occidental que salió por la vía democrática de la dirección nacional de un país, y regresó por esa misma vía. Su salida del poder comenzó al perder la mayoría absoluta de la Cámara de diputados federales en 1997, así como la gubernatura del influyente estado de Nuevo León, y luego en el año 2000 perdió la mayoría en la Cámara de senadores. Así que el siguiente paso fue consecuencia natural, perdiendo la presidencia de la república en el año 2000 –en la misma elección que perdió las grandes ciudades, como Monterrey- cuando el panista Vicente Fox recibió la banda presidencial de manos de Ernesto Zedillo. En ese momento, se pensaba que el PRI –como le ha sucedido a todos los grandes partidos hegemónicos del mundo- no regresaría más al poder. Después, en 2006, volvió a triunfar el PAN, con Felipe Calderón como abanderado. Pero en 2012, el PRI regresó a la senda del triunfo en las elecciones presidenciales para reinstalarse en Palacio Nacional. Seis años después, en 2018, volvió a salir del poder frente al partido MORENA que postuló a Andrés Manuel López Obrador. Hoy celebra el PRI el 93 aniversario de su fundación, buscando un nuevo esquema que le permita regresar al poder político.