08/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Marzo 1º. De 1854: se publica en Ayutla, Guerrero, el Plan de Ayutla, que desconocía la legitimidad del gobierno de Antonio López de Santa Anna y exigía su renuncia. Una vez derrotado ‘Su Alteza Serenísima’, se elegiría un presidente interino y los representantes de las diversas entidades del país para conformar un Congreso Constituyente que organice a la nación bajo la forma de una República Federal, representativa y popular. Desde luego que Juan N. Álvarez apoyaba este plan, pero la adhesión de Ignacio Comonfort, hizo que hubiera una reforma en Acapulco, que se publicó el 11 de marzo. Esto provocó a Santa Anna quien se dedicó a combatir el Plan, y el 16 de marzo marchó al sur del país, con cinco mil hombres, llegando a Chilpancingo el 19 de marzo adhiriéndose a su contingente muchos nuevos hombres pero hubo de enfrentar en el camino a Faustino Villalva, perdiendo a algunos.

El 19 de marzo Santa Anna llegó a Acapulco y se situó en el Farallón de las Huertas. Al día siguiente, envió a 900 hombres a atacar los cuatro fortines de defensa del puerto, que eran defendidos por Álvarez, Comonfort, Moreno y Solís. Tras varias horas de combate las tropas del gobierno se retiran y por la tarde, Manuel Céspedes exige la rendición de la plaza y Comonfort no acepta. El 26 de abril, sorpresivamente, Santa Anna –siguiendo con su errático comportamiento- abandonó el mando de la tropa y se retiró, dejando colgados de los árboles los cuerpos de los capitanes José Miguel Indar y Nicanor Vargas, fusilados al amanecer. La revolución se extendió por todo el país, y el 13 de julio de 1855 fue proclamado en la ciudad de México el Plan de Ayutla ya con algunas modificaciones. Al triunfo del Plan de Ayutla se convocó al Congreso Constituyente de 1856, que construyó la Constitución de 1857, documento que terminó con la era del caudillismo que personificaba López de Santa Anna. Cuántas cosas hemos tenido que realizar como nación para tener una Constitución Política, por eso nos da coraje cuando vemos que no se respeta.