El Gobierno de Nuevo León acudió ayer a la Oficialía de Partes del Congreso local a vetar las reformas que la 74 Legislatura del Congreso local hizo a la ley que regula el comercio en la vía pública para que los permisos de mercados rodantes se otorguen sólo de manera colectiva.
El veto fue entregado personalmente por el Secretario General de Gobierno, Manuel González, quien señaló que los cambios hechos por los Diputados violan las garantías individuales de los comerciantes que desean obtener un permiso sin la intervención de centrales obreras u otras agrupaciones.
"Sostenemos la bandera de las garantías individuales y de los derechos humanos de los ciudadanos que se veían privados de sus garantías en virtud de este decreto", expresó.
"Con este veto ---dijo---no hacemos más que sumarnos a la voluntad popular".
El funcionario manifestó que incluso la Asociación Metropolitana de Alcaldes pidió la intervención del Estado para que no se vulnere la libertad de los municipios para decidir de qué forma expiden sus autorizaciones para ejercer el comercio en la vía pública en la modalidad de mercados rodantes.
González dijo esperar que los legisladores atiendan estas observaciones como lo han hecho con otros vetos aplicados por el Gobierno, como fue el caso de la Ley de Protección Animal.