Enero 6 de 1820: Nace en Lampazos, Juan Zuazua Esparza, quien sería un militar destacado merecedor del apodo “General de generales”. Hijo de Juan Zuazua y Luisa Esparza, quedó huérfano desde tierna edad, pero estudió en la escuela de su pueblo y después en la del Hospicio, donde se aficionó a la lectura de las obras históricas y militares. Desde muy joven participaba en las campañas contra los indios bárbaros que atacaban a la población en esa región del estado. Y cuando Estados Unidos envió tropas en la Invasión norteamericana, Zuazua se inscribió en el ejército a las órdenes de Mariano Arista, combatiendo en La Resaca y Palo Alto ya con el grado de capitán, debido a la valentía y destreza mostrada desde el principio.
Participó en la Batalla de Monterrey y cuando Ampudia entregó la plaza, Zuazua se sumó a los hermanos Aldrete en Tamaulipas combatiendo a los invasores con la guerra de guerrillas al tiempo que hace lo propio el general Urrea, y participa en un combate en la Hacienda de Ramos (Doctor González) y en Marín. Regresó a Lampazos al combate contra los indios lipanes, comanches y seminoles, hasta que en 1855 lo invitó Santiago Vidaurri a secundar su Plan Restaurador de la Libertad. Aceptó y fue el líder de las fuerzas que atacaron Monterrey el 22 de mayo de ese año. Es ascendido a coronel, teniendo a su mando a Zaragoza, Escobedo y Aramberri -de donde viene lo de ‘General de Generales’ y apoyó a Vidaurri contra Wool en Tamaulipas, y contra Güitán en Saltillo, el 22 de julio.
En San Luis Potosí combatió a Parrodi, quien junto a De la Garza y Tamariz querían malinterpretar el Plan de Ayutla, ordenando a sus tropas que portaran una blusa roja, ya siendo el hombre fuerte de Vidaurri. Su talante valeroso y estrategia militar audaz, le dio triunfos en el la región noreste. En Zacatecas venció y fusiló al general Antonio Manero y en esa ciudad exclama: “la soberanía pertenece al pueblo y el pueblo que conoce su soberanía es invencible”. Obtiene un triunfo grande cuando engañó a Miramón con un movimiento falso a Guadalajara, replegándose en San Luis Potosí, combatiendo en esa ciudad el 29 de junio donde triunfó capturando al general José Gutiérrez de la Lama, éxito que le vale el ascenso al grado de General. Es el único de los militares grandes locales que se quedó con Vidaurri luego de la derrota en Ahualulco. Zuazua ocupó SLP y marchó sobre Aguascalientes y León, campaña en la que se le sumaron Zaragoza y Quiroga. Estando bajo las órdenes del ministro de guerra, Santos Degollado, optó por regresar a Monterrey, y cuando Vidaurri cae del gobierno, Zuazua se retiró a Lampazos hasta que regresó al poder su jefe Vidaurri. Cuando se desata el diferendo entre el Congreso del estado que se pronunció a favor de Juárez, tanto Vidaurri como Zuazua marcharon a Galeana a resolverlo, pernoctando en San Gregorio en donde una avanzada exploradora de Eugenio García los sorprendió disparándoles y Zuazua trató de levantarse pero una bala en la cabeza le mató instantáneamente.
El nombre de Juan Zuazua se vincula a los conceptos de valentía, inteligencia y lealtad. En su honor, el gobierno del estado erigió el 6 de marzo de 1863 en municipalidad a la antigua Hacienda de Santa Elena, con el nombre de General Zuazua. En 1894 se erigió una estatua de Zuazua en el paseo de la Reforma y en 1956, otra que hoy se ubica en la Macroplaza de Monterrey. Su nombre se inmortalizó bautizando así a varias escuelas y a una de las principales calles de la Ciudad, pues Juan Zuazua es un símbolo de que los hombres pueden luchar del lado político que deseen, pero siempre deben actuar con lealtad y entrega a la patria.
