19/Apr/2024
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Monsiváis, 10 años sin el intelectual generoso

La Universidad Autónoma de Nuevo León conmemoró el aniversario luctuoso de Carlos Monsiváis, a 10 años de su fallecimiento. Se destacó la figura social, cultural, literaria e intelectual del escritor mexicano.

 

Con una mesa moderada por Margarito Cuéllar y la participación de Joaquín Hurtado, Henoc de Santiago y Abraham Nuncio, la UANL recordó al escritor Carlos Monsiváis con la videoconferencia “A la mesa con Monsi, 10 años después”.

 Lo recordaron como el último hombre de su clase, una figura irremplazable para la cultura mexicana. Para Cuéllar, Monsiváis dejó un hueco enorme entre las filas de intelectuales nacionales debido a su acercamiento al país desde muchos puntos de vista.

 

 

El Director del Centro de Estudios Parlamentarios de la UANL, Abraham Nuncio, consideró que el autor de Nuevo catecismo para indios remisos tenía una naturaleza para interesarse por los temas sociales.

 “Una mente lúcida, una prosa realmente brillante que no se ha podido repetir, una prosa tan precisa y asociada a los mejores compendios de la literatura en español.

“Dotado de una enorme memoria, instrumento que le permitía por un lado acercarse de una manera muy natural a los grandes movimientos nacionales que han sucedido en el país. Lo encontraba yo en una marcha cubriéndola con un sentido periodístico”. Abraham Nuncio, Director del Centro de Estudios Parlamentarios de la UANL

El autor de El grupo Monterrey recordó la forma de trabajar de Monsiváis, que consistía en una enorme mesa de centro repleta de libros. Al lado de la máquina de escribir, un teléfono.

 Estas eran las herramientas con las que Carlos Monsiváis se desarrolló como el gran escritor de su tiempo.

 

Un vecino cualquiera

Hurtado narró su encuentro con Monsiváis en la calle de San Simón No. 62 en la Col. Portales. Su amor y admiración por el escritor nació durante sus tiempos como estudiante en la Normal Superior. Lecturas como Amor perdido hicieron adorar el estilo y enfoque del último gran cronista mexicano.

 “Me pareció un poco extraño porque yo me imaginaba una casa diferente, en un barrio distinto. A un señor estirado y muy dado a las cuestiones del intelecto y la alta cultura, pero nada, era como cualquier vecino. Nos recibió con un gato en el regazo.

 “Le solicité viniera a Monterrey. Vino y dio una conferencia en el Museo Metropolitano sobre VIH y Derechos Humanos.

 “Vino como padrino y nos dio su bendición públicamente. Nos volvimos gente muy respetada. Cuidábamos mucho lo que decíamos porque ya éramos amigos de Carlos Monsiváis. Así de grande era su figura”, señaló el autor de Laredo Song en su intervención.

 

 

 

El Estanquillo

A través de sus colecciones de artículos, el público que asiste a El Estanquillo se lleva una parte de Monsiváis.

 Para el Director General del Museo del Estanquillo -inmueble que resguarda y fomenta la investigación en torno a las colecciones de Carlos Monsiváis-, Henoc de Santiago, está seguro de que gran parte de la población recuerda al escritor gracias a su calidez humana.

“Carlos fue muy querido en la Ciudad de México, su fuente de inspiración, pero también en el exterior de la república porque era una esponja que iba absorbiendo todo lo que pasaba a su alrededor; todos los procesos culturales del país. Henoc de Santiago, Director General del Museo del Estanquillo

“Si bien era un todólogo de la vida cultural de la ciudad, sí lo iba dividiendo en diversas facetas, que tienen mucha correspondencia con lo que él iba coleccionando.

 “Son 40 años de su vida se dedicó a recorrer todo el país, a recopilar objetos de arte y cultura popular, obras de arte de primerísimo nivel que adquiría con sus contemporáneos a través del trueque.

 “Hay gente que no ha leído a Carlos Monsiváis pero lo conocen a través de sus colecciones, a través de los eventos que hacemos acerca de sus colecciones. Ahí está su pensamiento”, sentenció De Santiago.