Febrero 1º de 1823: Se suscribe en Veracruz el Plan de Casa Mata por Antonio López de Santa Anna, Nicolás Bravo, y Anastasio Bustamante, en contra del Imperio Mexicano y su titular Agustín I.
Este plan, urdido por Miguel Ramos Arizpe y José Mariano Michelena, contemplaba cuatro puntos principales:
1º.- Se debería llamar a elecciones de un nuevo Congreso, en virtud de que Iturbide había desaparecido el anterior.
2º.- El ejército nacional debería estar en un plan de absoluta sumisión a la soberanía nacional.
3º.- Se correría invitación a todas las provincias para que se incorporaran a este movimiento revolucionario.
4º.- Se respetaría a la persona del Emperador mexicano.
Una vez publicado este Plan de Casa Mata, las provincias comenzaron a aceptarlo a partir del día 2 de febrero hasta el 15 de abril de 1823. El Nuevo Reino de León lo aceptó el 6 de marzo de ese año.
Lo que siguió a este evento ya no tuvo fuerza política, pues Agustín de Iturbide restauró en marzo 4 el Congreso que había desaparecido, compareciendo ante él y solicitándole en forma sentida el perdón y el olvido de su falta, pidiendo que todos se unan de nuevo por el bien de la patria.
Sin embargo, la suerte ya estaba echada y el 19 de marzo siguiente tiene que abdicar e irse del país, en fecha 26 de marzo de 1823.
Así, el Poder Ejecutivo quedó en manos de un triunvirato formado por tres héroes: Pedro Celestino Negrete, Nicolás Bravo y Guadalupe Victoria. Para posteriormente, el 1º de noviembre de 1823, declarar a México un país federal.