Las nuevas administraciones municipales del área metropolitana y por donde pasan 77 kilómetros del río Pesquería firmaron un convenio para acordar , en un segundo intento, en estos dos últimos años, ahora sí sanear el río.
La sede fue el municipio de Monterrey que gobierna el alcalde Adrián de la Garza y donde estuvieron los ediles de García, Pesquería, Escobedo y Apodaca, quienes hablaron de establecer un esquema de trabajo conjunto para limpiar y proteger dicho cauce.
De la Garza señaló que enfrentarán la problemática del río la enfrentarán en conjunto pues la creciente mancha urbana también afecta el cause.
Según explicó Clara Luz Flores, alcaldesa de Escobedo, se trabajará en precisar los límites de cada municipio, zonas de riesgo, quienes colindan con el río y que empresas llegan a tirar los desechos al río, cuántos asentamientos humanos hay, todos bajo una Coordinación Técnica que aseguró ya comenzó a trabajar.
Por su parte, Oscar Gutiérrez , delegado de la Comisión Nacional del Agua aceptó que aún no se tiene un censo para conocer que tantas empresas realizan sus descargas de desechos sobre el río.
En marzo del 2014, los entonces alcaldes fueron reunidos en la Secretaría General de Gobierno que en ese entonces la presidía Alvaro Ibarra y anunciaron la creación de una comisión de vigilancia en los tramos de García, Monterrey, Escobedo, Apodaca y Pesquería.
Fernando Gutiérrez Moreno, secretario de Desarrollo Sustentable, anunció dicho acuerdo tras reunirse en privado con todos los actores concretando que realizarían acciones a corto y largo plazo para el saneamiento del río a lo largo de 75 kilómetros, esto tras darse a conocer la muerte de cientos de peces en el río por la contaminación de que estaba haciendo objeto.
En dicha reunión estaban Emilio Rangel Woodyard, director de Servicios de Agua y Drenaje de Monterrey; í“scar Gutiérrez Santana, delegado de Conagua; Guillermo Cueva Sada, delegado de la Semarnat; Víctor Jaime Cabrera, delegado de la Profepa, y así los alcaldes de García, Jesús Hernández; de Pesquería, José Gloria López; de Apodaca, Raymundo Flores Elizondo; de Escobedo, César Caballero; y Brenda Sánchez Castro, secretaria de Desarrollo Urbano de Monterrey.
Hablaron en ese tiempo de hacer vigilancia las 24 horas, rondines con elementos de Fuerza Civil como acciones a corto plazo.
ESTUDIO
Por su parte, la Facultad de Ingeniería Civil de la UANL presentó un informe concluyente de varios estudios realizados del río que nace en Ramos Arizpe Coahuila (zona industrial) y que en Nuevo León pasan por 77 .4 kilómetros lineales pero que detallado por ambas aceras son: en García 28 kilómetros; Escobedo 32 por ambas aceras ; por Monterrey 3.4 kilómetros; por Apodaca 39 kilómetros por ambas aceras y Pesquería 22 kilómetros por ambas aceras.
El estudio precisa que las hectáreas mínimas que se requieren para garantizar la vida dentro de el son alrededor de 530 "que deben dejarse como intocables" y reparar aquellas zonas dañadas.
Establece como objetivos se incrementen los niveles de contaminación, los asentamientos humanos tanto en áreas federales como aquellas llamadas base que están en riesgo de inundación aunque estén fuera de competencia federal que debería ser de amortiguamiento en caso de aguas crecientes.
Los compromisos de todos dice el estudio :delimitar las áreas federales, notificar a los asentamientos existentes que están en zonas de riesgo, actualizar un censo de las áreas invadidas; ejecutar accione legales a quienes descargan aguas residuales o escombros.
El directivo universitario reconoció que ha habido acciones municipales pero estas poco han avanzado al trabajarse desarticuladamente.
