04/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Septiembre 21 de 1846: Día de la Batalla de Monterrey. Ya en plena Guerra de Invasión -Texas ya era parte de la Unión Americana-, el general Zachary Taylor –luego presidente de Estados Unidos- al frente de las tropas invasoras con 6 mil 647 hombres arribó el día 19 de septiembre a las inmediaciones de Monterrey. Por la parte mexicana, Pedro de Ampudia -militar de todas las confianzas de López de Santa Anna-, defendía la plaza con 7 mil efectivos, lo que significa que la diferencia entrambas partes no era grande en soldados, sino en armamento y preparación militar. Iniciaron las acciones el día 21 en dos frentes: por el lado oriente de la Ciudad, Taylor, y por el lado poniente, William Worth..

La mañana de este día inició con el primer enfrentamiento de Worth contra la caballería mexicana por el rumbo de San Jerónimo, al poniente de la Ciudad. En la primera escaramuza del día, 200 lanceros mexicanos al mando de Juan N. Nájera y Mariano Moret, se enfrentaron de poder a poder, y los norteamericanos se impusieron perdiendo los mexicanos unos 30 soldados, entre ellos al propio coronel Nájera. Luego Worth atacó la Loma Larga con 800 soldados y la tomó, mientras en el Oriente, Taylor envió a 800 hombres pensando que sería fácil entrar a la Ciudad, pero la artillería mexicana apostada en los fortines de La Tenería y Del Diablo causaron importantes bajas a los norteamericanos; al meterse por las calles angostas del centro oriente de la Ciudad, los francotiradores nacionales que estaban alrededor de Tenería, los enfrentaron exitosamente. El ataque norteamericano al Fortín de la Tenería fue costoso en vidas, pues los 350 hombres que la resguardaban a cargo de José María Carrasco contuvieron por buen tiempo a los invasores. Todo iba bien para los nuestros en esas condiciones, pero Taylor envió refuerzos para salvar a los suyos que sobrevivieron al ataque mexicano. Y por nuestro lado, Ampudia no envió ayuda a sus soldados que ya enfrentaban además del primer contingente, a los Rifleros del Mississipi, por lo que ese importante punto de defensa cayó en manos de los invasores.    

Este día 21 fue crucial para la Batalla de Monterrey, pues la estrategia militar, el armamento, y el profesionalismo de los soldados norteamericanos fueron determinantes para que durante ese día los nacionales perdieran en varios frentes. Lo sucedido al día siguiente, motivo de otro comentario futuro, llevó a pensar a Ampudia que iba perdiendo la batalla, a pesar de que el número de caídos de un lado y otro era similar, por lo que el día 23 de septiembre Ampudia capituló entregando la plaza a los norteamericanos, quienes se quedaron por un año y ocho meses gobernando a nuestro Estado, hasta que se llevaron, por conducto del Tratado Guadalupe- Hidalgo firmado en la capital mexicana, más de la mitad del territorio mexicano, comenzó la evacuación de sus tropas.