Internacional

Más de 800 combatientes del EI mueren en la ofensiva de Mosul

Entre 800 y 900 combatientes del grupo yihadista Estado Islámico (EI) han muerto desde que empezó la ofensiva terrestre de las fuerzas iraquí­es para reconquistar Mosul, en el norte de Irak.

"Estimamos que probablemente murieron entre 800 y 900 combatientes del EI en las operaciones lanzadas hace una semana y media", desde el 17 de octubre, declaró a la AFP el general estadounidense Joseph Votel, que dirige el Mando Central de Estados Unidos (Centcom).

El comandante de las fuerzas estadounidenses en Oriente Medio dijo sin embargo que será difí­cil dar cifras porque los combatientes del EI se desplazan alrededor de Mosul e intentan disimularse entre la población civil.

El EI ya no tiene capacidad para desplazarse en grandes convoyes, pero la coalición internacional advierte de que todaví­a se mueven en pequeños grupos.

Las fuerzas de seguridad iraquí­es y los combatientes kurdos avanzan en dirección a Mosul desde varios puntos y hasta ahora su avance hacia la segunda ciudad de Irak, de 1,5 millones de habitantes, ha sido relativamente rápido.

Por el momento, la ofensiva, que empezó hace diez dí­as, se concentra en las localidades y pueblos cercanos a la ciudad.

La resistencia podrí­a ser más aguerrida a medida que las fuerza iraquí­es y kurdas se acerquen a las lí­neas de defensas mas cercanas a la periferia y en el momento de penetrar en Mosul.

Las últimas estimaciones estadounidenses daban cuenta de entre 3.000 y 5.000 combatientes en la ciudad y entre 1.000 y 1.500 o 2000 diseminados en la periferia.

La coalición internacional advirtió de que no utilizarí­a los balances de ví­ctimas como indicador de la eficacia de la ofensiva contra el Estado Islámico en Irak y Siria.

Sin embargo, a pesar de esa afirmación, periódicamente publica balances de ví­ctimas.

- Cada vez más desplazados -

A medida que las tropas iraquí­es avanzan hacia Mosul, aumenta el flujo de desplazados. "Hay un aumento bastante espectacular de los desplazados en los últimos dí­as", declaró Karl Schembri, del Consejo Noruego para los Refugiados.

"Las tropas iraquí­es avanzan en zonas cada vez más pobladas y, por lo tanto, hay más desplazados", agregó.

El jueves, el ministerio iraquí­ de Migración y de Desplazados anunció que habí­a acogido a más de 11.700 desplazados desde el inicio de la ofensiva.

Los desplazados cuentan el sufrimiento diario bajo el régimen brutal del Estado Islámico.

Algunos han podido reencontrarse con familiares a los que no veí­an desde que el Estados Islámico se apoderó de Mosul en junio de 2014.

"No podí­amos fumar ni utilizar los teléfonos. No podí­amos ver la televisión y estábamos obligados a dejar crecer la barba", contó Saddam Dahham, que vivió en una aldea cercana a Mosul bajo control del EI.

Tras huir de la aldea con su mujer y sus tres hijos, lo primero que hizo fue cortarse la barba.

La ONU y las ONG presentes cerca de Mosul temen una crisis humanitaria. "Esperamos hasta 200.000 desplazados en los próximos dí­as", dijo Schembri. "Y por ahora hay capacidad para acoger sólo a 60.000", agregó.

Desde el 17 de octubre, decenas de miles de combatientes iraquí­es avanzan hacia Mosul desde el sur, el este y el norte de Irak.

La ofensiva tiene el respaldo de la aviación de la coalición liderada por Estados Unidos, que incluye a Francia y Reino Unido.

La coalición aporta también asesoramiento para las operaciones terrestre con la presencia de consejeros y tropas de élite.

Desde el inicio de la ofensiva, las fuerzas iraquí­es y los peshmergas (combatientes) kurdos han recuperado varias localidades y ciudades en un avance cauteloso pero constante.